A Verónica Minardi, su madre, la escritora Norma Gandolfo, le aconsejó que probara con la carrera de periodismo y ella le hizo caso.

En verdad, lo que quería Verónica era espiar en el recorrido de su madre, una prolífica escritora, admirada por su prosa y su poesía. Pero siguió el consejo y su curiosidad y espíritu andador la llevaron a buscar en la gente, en las personas, historias dignas de contar.

Para ella, detrás de cada persona hay una historia, un camino recorrido, enseñanzas, caídas, tropiezos y resurrecciones.

Desde hace 24 años conduce y produce Protagonistas, un programa de entrevistas que hoy puede verse en la programación de CPTV. 

“Soy un alma que busca encontrar la felicidad a través del dar. Y soy un alma inquieta porque el periodismo es una búsqueda permanente”; dice la conductora mientras se prepara para nuevas entrevistas en un coqueto hotel de la ciudad.

“Hace 24 años que estoy en la producción y conducción de Protagonistas, un programa que es como un hijo para mí. Son historias de vida de superación, de resiliencia que son disparadores para mi propia vida”; dice y agrega: “De alguna manera me dieron la fuerza para enfrentar una enfermedad crónica que me toca vivir. Al programa le debo todo lo que soy . Nos hacen falta disparadores para poder encontrar el camino”.

 

El camino del periodismo

Verónica cuenta cómo empezó su carrera en el ámbito del periodismo. “Tenía 18 años. Mi mamá era escritora de la villa y yo le dije que quería ser escritora como ella. Y ella me recomendó ser periodista”, relata.

“Empecé a estudiar, me recibí. Hoy tengo ganas de ser escritora. Pero estudié periodismo porque me parecía que tenía que darle al mundo una gotita más de calidad de vida. No me convencía el periodismo crítico, agresivo. Pero también tiene que marcar las buenas noticias, las historias de superación”.

La búsqueda

 

¿Cómo se produce un programa de entrevistas en una región como Punilla?, le preguntamos a Verónica.

Y dice: “Después de tantos años, a donde voy tengo la costumbre de preguntar. En un taxi, charlo con el taxista o en un hotel lo mismo. Una historia lleva a otra y esa a otra. Y yo creo que todos tenemos una historia de vida de resiliencia”.

“Preguntando, y caminando descubro historias fascinantes, espectaculares, que vale la pena destacar y conocer. Llevo toda una vida conociendo tantas personas, tantas almas, y cada vez que una persona cuesta su historia deja un pedacito de su alma”, resume la conductora.