Con la pandemia, el merendero Solecitos Naranja debió cerrar sus puertas. Sin embargo, continúan trabajando más que nunca. Todos los jueves, un grupo de voluntarios se juntan para amasar productos y entregarlos a cerca de 50 familias.

Aunque el objetivo del merendero, que se encuentra ubicado en calle Monte Sacramento y Cerro Itatí de barrio Colinas, continúa siendo el mismo, la actividad debió acomodarse a esta nueva normalidad que transitamos.

La copa de leche ya no se sirve todos los días como se solía hacer en otros tiempos; pero todas las semanas los vecinos que se encuentran en una situación vulnerable, se llevan algún alimento.

Con las donaciones se arman bolsones y, además, amasan fideos, pan y pre pizzas; y, de esa manera, ayudan a las familias del sector a transitar de la mejor manera la crisis económica.

María Romero y Marcelo Fernández son voluntarios del merendero y destacaron que son cada vez más las familias que concurren a buscar alimentos. Para ellos, el sector donde se encuentra ubicado este espacio es el que más carencias tiene de toda la ciudad, “es la parte que no se ve, la que esconden”.

“Es difícil conseguir donaciones. Cada jueves se suman tres o cuatro familias que llegan a preguntarnos si pueden retirar algo y no podemos decirles que no”, comentaron.

Aquellos que quieran colaborar con el merendero, pueden comunicarse al teléfono 3541-527514.