Catalina Chialva, una de las mamás de Carlos Paz, impulsoras del proyecto de ley de acogimiento en Córdoba.

La legisladora del Frente Cívico, Nancy Almada, presentó en las últimas semanas un proyecto de ley llamado Régimen de Familias de Acogimiento para Niños, Niñas y Adolescentes en la Provincia de Córdoba 42195/25. Este busca transformar el actual programa de acogimiento familiar en una política de Estado, con un marco legal que garantice el derecho de cada niño y niña a crecer en un entorno familiar afectivo, seguro y estable.

El proyecto propone crear el Régimen de Familias de Acogimiento para niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad, y establece principios rectores como el interés superior del niño, el derecho a la continuidad afectiva, la celeridad en los procesos y la participación activa de las familias de acogida.

Asimismo, prevé la creación de un Registro Provincial de Familias de Acogimiento y un Fondo Provincial específico para acompañar y asistir tanto a los niños como a las familias que los reciben.

Uno de los puntos centrales es la prioridad de adopción para las familias de acogida cuando se generen vínculos afectivos sólidos y aún no se haya resuelto la situación judicial del niño o niña.

La propuesta también contempla un proceso paulatino de transición hacia la familia adoptiva, con acompañamiento de equipos interdisciplinarios y criterios técnicos que minimicen el impacto emocional en los menores.

El testimonio de Catalina

Catalina Chialva es una carlospacense cuya familia, compuesta por su esposo y sus cuatro hijos, desde hace años recibe a niños en condiciones de vulnerabilidad, en su hogar. Ella es una de las impulsoras de este nuevo proyecto de ley de acogimiento.

En diálogo con el programa radial Mentes Inquietas, Chialva expresó: “Nosotros tuvimos un bebé en acogimiento. Nos anotamos con mi esposo y nuestra familia debido a la gran necesidad que existe de familias que puedan recibir a niños en sus hogares, niños y niñas que se encuentran en situaciones con medidas extraordinaria. Es decir, se necesitan familias para no institucionalizar a los niños, se los puede tener en guarda por un tiempo. La ley dice que son 180 días, pero la realidad es que se extiende”.

Luego, contó detalladamente su experiencia: “Nosotros tuvimos en casa a nuestro niño más de un año. Luego tuvo que irse y se fue a vivir con una familia que lo adoptó junto con su hermano. A raíz de lo vivido, notamos el problema que se había producido y que ocurre en muchos casos. Esto es que los niños generan vínculos y se arraigan a las familias, por la demora que hay en la Justicia de alguna manera, por por lo que sea”.

Además, Chialva remarcó: “Todo hace que tanto niños como familias de acogimiento queden dolidos, es un un desarraigo más en la vida de ese niño que no tiene la culpa o que no sabe lo que pasa o que no entiende la situación”.

En relación al proyecto de ley de acogimiento que decidieron impulsar de la mano de la legisladora Nancy Almada, la mujer expresó: “ Nosotros vimos que no se estaba cubriendo ni cuidando el interés superior del niño, por lo cual buscamos ayuda en la legisladora. Ella nos escuchó a varias a familias que contamos nuestro testimonio. En función de esto, Almada comenzó a trabajar automáticamente junto a su equipo. De esa manera generamos esta propuesta que es un proyecto de ley para regular lo que son las familias de acogimiento, que tiene varias cuestiones principales.

Sobre estas cuestiones, Chialva enfatizó: “Es necesario tener en cuenta la opinión del niño o niña al momento de irse de su familia de acogimiento y recibir una nueva familia, escucharlos realmente. Otras de las cuestiones clave que trata este proyecto de ley, es que la familia de acogimiento pueda ser parte de la de la vida de ese niño por el tiempo que haya transcurrido y más que nada por la calidad del vínculo logrado con la familia de acogimiento”.

Luego, aclaró: “No todas las familias de acogimiento quieren adoptar porque se entiende, es algo que te lo dicen cuando vos vas a tener un niño en acogimiento, que no podés adoptarlo, pero en realidad ahí hay un gris legal en ese aspecto. Entonces, lo que queremos es darle un marco a esta situación, para que quede muy claro qué debe o no esperar una familia que acoge a niños, que quede plasmado en una ley y se la pueda respetar”.

Asimismo, Chialva manifestó: “Buscamos que las familias de acogimiento puedan opinar al momento en que el niño entra en el momento de vinculación con su nueva familia. Hoy por hoy, la familia acogimiento queda automáticamente destituida y consideramos que eso no puede pasar”.

Para finalizar, Chialva dijo: “Este nuevo proyecto de ley que ya ingresó para ser debatido en la Comisión de Niñez, Adolescencia y familia, no es un atajo para evadir al RUA, que es el Registro Único de adopción. La ley de adopción seguirá estando, nosotros sólo queremos mejorar las circunstancias actuales para las familias de acogimiento y para los niños y niñas que transitan por ellas y reciben su amor”.

Por su parte, la legisladora Nancy Almada, sostuvo en relación al proyecto de ley: “Esta ley busca que el amor y la estabilidad emocional de los chicos no queden a merced de los tiempos judiciales. Que si un niño encuentra un hogar, ese vínculo sea protegido y respetado”.

Y concluyó: “La sociedad le exige al Estado que esté a la altura de lo que los chicos necesitan: afecto, contención y un entorno donde puedan crecer. Este proyecto es una herramienta concreta para garantizar eso”.