Abel Ramos nació en Quilmes, Buenos Aires, pasó parte de su primera infancia en Villa Carlos Paz, y cuestiones de la vida lo llevaron a radicarse hace mucho tiempo en Estados Unidos. Pero nunca olvidó sus orígenes, ya que todos los años regresa a la “Perla de Punilla” a pasar las fiestas navideñas. Pero esta vez volvió y trajo un importante regalo para que se ponga al servicio de los turistas que visitan diariamente el Cerro de la Cruz.
“Desde muy chico vengo a Carlos Paz, me encanta la montaña y siempre que vengo subo al Cerro de La Cruz. Vi que hicieron ciertos cambios, y que ahora hay control y orientación a los turistas. Me encantó la modificación y me pareció que podía colaborar con algo porque vi que está realizado todo a pulmón, más allá de que tiene el apoyo de la ciudad”, expresó Abel.
Y detalló: “Les pregunté a los chicos qué elementos les hacían falta, y en base a eso se me ocurrió traer equipos, que aunque no son gran cosa pueden ayudar a mejorar la atención. Por eso me pareció dejar un botiquín de primeros auxilios, y después pensé en que si hay una emergencia lo más importante es tener una buena vía de comunicación con alguien que nos pueda brindar más ayuda. Por eso se me ocurrió traer dos equipos de radio para que por las frecuencias se puedan conectar con las diversas áreas de seguridad”.
Por su parte, Jésica Rodríguez, una de las guías de turismo que presta servicios en el Cerro de la Cruz, agradeció el gesto de Abel, y sostuvo: “Todos los aportes nos ayudan a realizar nuestro trabajo diario. Más allá que este lugar tenga el apoyo del municipio y de la provincia, sería importante que toda la comunidad pueda colaborar”.