El presidente electo criticó abiertamente al organismo por la aprobación de la resolución que condena los asentamientos israelíes en territorios ocupados a los palestinos.
La crítica de Trump sigue a otro tuit difundido el viernes pasado en el que advirtió que, a partir del 20 de enero, cuando llegue a la Casa Blanca, “las cosas (en la ONU) van a ser diferentes”. El enojo que expresó se debe a que él mismo había pedido que Estados Unidos vetara la resolución sobre los asentamientos israelíes, una tradicional política estadounidense.
La resolución fue aprobada por 14 votos a favor y la abstención de Estados Unidos, que no ejerció el derecho de veto que le confiere su calidad de país con asiento permanente en el máximo órgano de decisiones de la ONU.
El proyecto de resolución, que recibió fuertes críticas de Israel, fue llevado al consejo por Venezuela, Nueva Zelanda, Malasia y Senegal, después de que se echara para atrás Egipto, país que en un principio llevaba la iniciativa.
Un día después de esa votación, Trump dijo que la decisión es “una gran pérdida para Israel en la ONU” y consideró que “haría más difícil” negociar la paz entre israelíes y palestinos.