La comunidad educativa y toda la sociedad de Carlos Paz está de luto tras la partida de Pablo Calamita, un reconocido docente y director que dejó una huella imborrable en el ámbito educativo y en la vida de muchas generaciones de estudiantes. Calamita falleció este lunes, dejando atrás un legado de dedicación y valores que marcaron a la comunidad local.
Nacido en Bitonto, provincia de Bari, Italia, Pablo llegó a Argentina en 1954. En su juventud, cursó el secundario en el colegio Euskal-Echea, donde conoció a Eva, el gran amor de su vida, con quien compartió más de cinco décadas de matrimonio y formó una familia numerosa con seis hijos.
Radicado en Villa Carlos Paz desde 1976, Calamita dedicó 28 años de su carrera a la enseñanza en el Instituto de Enseñanza Secundaria (IES), además de desempeñarse en otras instituciones como el colegio parroquial Bernardo D’Elía y el San Carlos de Malagueño. Su vocación docente y su carácter afable lo convirtieron en una figura respetada y admirada por alumnos, colegas y vecinos.
A su esposa Eva, sus hijos y nietos, la comunidad de Villa Carlos Paz les extiende un cálido abrazo en este difícil momento.
Con información de Luis Tórtolo – Encuentro’S Con La Villa