La agrupación Mujeres por la villa, encabezada por Virginia Monassa, rendirá un homenaje hoy a la implementación del voto femenino en la Argentina. La ley impulsada por Eva Perón fue sancionada en 1947.
La socióloga María del Carmen Feijóo destacó dos aspectos del hecho: el primero, contribuir a la memoria colectiva de las jóvenes recordando lo reciente de esta conquista; el segundo, recuperar para la cultura política de este siglo la inusual lección de convivencia democrática que dio la Cámara de Diputados cuando votó la ley en la sesión especial del 9 de setiembre de 1947.
Feijóo recordó que se discutía, en realidad, el lugar de la mujer en la sociedad, para lo que fue necesario en la sesión del congreso demoler los argumentos de Otto Weineger sobre la desigualdad femenina y agregar una audaz asociación entre las posturas restrictivas de la libertad política femenina con la teoría antidemocrática.
Ante la alternativa que se suscitó entonces entre mujer o madre, recordó al Martín Fierro: “yo alabo al Eterno Padre… porque a todas ellas les dio corazón de madre”
En aquella sesión dos legisladores fueron disonantes con el clima de la reunión en los aspectos que recordamos: respecto de la tolerancia, el radical Salvador Sanmartino, que definió al país como un volcán de pasiones, rencillas y odios, que a su juicio constituía un mal momento para introducir el sufragio. Y el conservador Pastor, que defendió un despacho de minoría.