En las últimas horas, se hizo público el violento robo que sufrió este domingo una pareja de vendedores ambulantes en el reconocido balneario Playas de Oro y, a partir de este hecho, vecinos y trabajadores del sector demandan mayor control policial y fundamentalmente mayor iluminación.
A raíz del último episodio delictivo, aprovecharon para recordar uno de los problemas que se repiten cada verano: “Viene la época de la temporada y, a la noche, los delincuentes se apoderan del sector”.
Sobre la estrategia delictiva, uno de los vecinos que prefirió resguardar su nombre, comentó: “Para oscurecer todo, cortan los cables de las cajas que están instaladas en los postes de alumbrado público; y de esa manera dejan todo sin luz y pueden robar tranquilos”.
Pero más allá del pedido de mayor presencial policial a fin de evitar una creciente seguidilla de robos, los vecinos demandan el arreglo urgente de las columnas, ya que también representan un peligro para los vecinos y turistas que día a día visitan el balneario; principalmente para los niños y animales.