Una vez más barrio Santa Rita de Villa Carlos Paz fue víctima de un grave hecho de inseguridad, este sábado al atardecer. La familia Tucci salió sólo por unas horas de su casa de barrio Santa Rita, y la desvalijaron, se llevaron todo lo que encontraron.
“Es una casa con rejas, un perro y otras medidas de seguridad, pero no les importó y nos sacaron absolutamente todo lo de valor que teníamos”, contó Ezequiel Tucci en diálogo con Carlos Paz Vivo!
Luego, el hombre detalló: “Salimos de casa a las 18 hs, y a las 21 hs, un vecino me avisó que una de las puertas de mi casa estaba abierta, la del costado. Entraron por la ventana de atrás, rompieron la persiana. Dieron vuelta la casa, literalmente, hasta arrancaron mesas de luz de la pared”.
Los delincuentes robaron computadoras, ropa, zapatillas, alhajas de oro, seis relojes, y dinero en efectivo (pesos y dólares) y otros objetos menores.
“No dejaron nada. Deben haber estado en casa media hora o cuarenta minutos. Se movían en un Corsa Gris, con la patente de un Suzuki Fan de Buenos Aires: GBG988. Un vecino los vio y cuando corroboramos la patente, nos dimos cuenta que ésta no correspondía con el auto”, aseguró Tucci.
La denuncia y un sistema lento
Respecto a la denuncia del robo, manifestó: “Hicimos la denuncia este lunes y esperando, en la Unidad Judicial, había al menos 7 u 8 personas a las que les había pasado lo mismo, este fin de semana. Nos tomaron la declaración rápido pero el sistema no funciona, es lento. Para pedir las imágenes de las cámaras de seguridad de Carlos Paz hay que hacer mucho trámite. Un juez tiene que enviar una orden a Córdoba y es un trastorno que no tiene sentido. El auto que nos robó quizás ya esté en otro punto del país, lejos”.
“Un barrio entregado”
Tucci manifestó que tienen muy pocas esperanzas de que las cosas cambien en el barrio en materia de seguridad. “Seguimos ordenando la casa y continuamos dándonos cuenta de las cosas que faltan, que nos robaron”, dijo.
Y añadió: “Pensamos que es un barrio entregado. Roban en forma permanente, uno o dos robos por día, entre motos y casas. A la policía les dije que no puede ser que roben así, refiréndome a las motos, y me contestaron que sabían quiénes eran pero que no podían hacer nada”.
Para concluir, el hombre destacó: “Lo que más nos va a costar recuperar es la tranquilidad”.