Los homenajes al fiscal de la UFI-AMIA Alberto Nisman, a dos años de su muerte, comenzarán este martes por la noche y continuarán el miércoles con un acto central organizado por la DAIA que se desarrollará frente a la sede de la unidad de investigación del atentado a la mutual judía AMIA, en las cercanías de la Plaza de Mayo.
La DAIA propuso que este martes, a las 21, “quienes quieran plegarse al reclamo por el esclarecimiento de la muerte” de Nisman coloquen dos velas en sus ventanas, una por cada año de la muerte del fiscal, descubierta el 18 de enero de 2015, cuando estaba al frente de la UFI-AMIA, el organismo del Ministerio Público que investiga el atentado a la mutual judía.
En tanto, el miércoles a las 18 horas, se realizará una marcha en Hipólito Yrigoyen y Bolívar, frente a la UFI-AMIA, en las cercanías de Plaza de Mayo bajo los lemas “Justicia por Nisman” y “Donde hay memoria, hay justicia”.
El diputado nacional Waldo Wolff, uno de los organizadores del acto del miércoles, detalló que se tratará de un homenaje “muy respetuoso” y que, por ello, se eligieron oradores ajenos a “cuestiones partidarias”.
Entre ellos están confirmados el escritor Federico Andahazi, el fiscal de la Cámara Federal de Apelaciones Germán Moldes y Luis Czyzewski, padre de una víctima del atentado a la AMIA, quienes recordarán la trayectoria del fiscal fallecido a los 51 años.
También convocó al acto del miércoles el titular de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), Ariel Cohen Sabban, quien se pronunció a favor de que la muerte de Nisman sea esclarecida “de manera inmediata”.
Cohen Sabban dijo que en la marcha frente a la UFI-AMIA “necesitamos mostrarle a todos los que tienen responsabilidad en esto que los argentinos no podemos seguir esperando justicia”, y pidió que “toda la ciudadanía acompañe” el reclamo.
Por otra parte, la escultura que será emplazada en Israel, en la Galería de la Torre de Agua de la ciudad mediterránea de Naharía, estuvo a cargo de un artista local, Israel Ghelman, quien explicó a Télam que la obra está centrada en “una Estrella de David rota, en representación de la comunidad agredida, una balanza desequilibrada como símbolo de negación de justicia y una columna rota, sobre la que se yergue la escultura, como símbolo de la destrucción de la sede de la AMIA”.