La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) informó este sábado que debido a decisiones de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, la puesta en órbita del satélite argentino Saocom 1B fue reprogramada para fines de agosto.
En un comunicado, la Conae señaló que el Satélite Argentino de Observación Con Microondas (Saocom) 1B se encuentra en óptimas condiciones y listo para ser lanzado, tras cumplir con éxito todos los ensayos realizados por el equipo de 18 profesionales de esa comisión y de INVAP que viajaron a Estados Unidos.
Sin embargo, señaló que hubo que reprogramar la fecha inicialmente prevista para fines de julio debido al tiempo adicional que requirió la empresa SpaceX, a cargo del lanzamiento del Saocom 1B en Cabo Cañaveral, para la puesta a punto del vehículo lanzador.
Por eso, la Fuerza Aérea de Estados Unidos, responsable de otorgar las autorizaciones para los lanzamientos de misiones espaciales, dispuso la reprogramación.
“Este tiempo adicional implica un acercamiento a otros lanzamientos previstos desde esa Base, por lo cual la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, encargada de las autorizaciones de los lanzamientos de misiones espaciales desde Cabo Cañaveral, dispuso esta reprogramación”, explicó el comunicado oficial.
La Conae destacó el compromiso y la dedicación de los ingenieros argentinos para concluir con la campaña de lanzamiento del satélite que completará la constelación Saocom, ya que en octubre de 2018 fue lanzado el Saocom 1A de idéntico diseño.
El objetivo central de estos satélites es la medición de la humedad del suelo y aplicaciones en emergencias, tales como detección de derrames de hidrocarburos en el mar y seguimiento de la cobertura de agua durante inundaciones.
Se trata de un sistema de dos satélites de observación terrestre equipados con un radar de apertura sintética SAR polarimétrico en banda L y una antena desplegada de 35 metros cuadrados.
Una vez que se concrete el lanzamiento del Saocom 1B, ambos satélites actuarán “en tándem” en el relevamiento de información, orbitando a 620 kilómetros de altura.