María Sol Ordás, reciente medalla de oro en remo de los Juegos Olímpicos de la Juventud que se disputaron en Buenos Aires, volvió por segunda vez a remar en el agua del Lago San Roque durante la Regata Villa Carlos Paz y dejó sus impresiones sobre el remo local y el entorno favorable para el mismo.
“La pista es increíble”, lanzó como primera frase la remera de Teutonia y analizó las diferencias entre remar en nuestra ciudad o en la costa bonaerense: “El único inconveniente de este lugar es el viento, que puede generar muchas olas. Pero es hermoso remar en estos lugares”.
El remo carlospacense resurgió hace menos de una década y el crecimiento del club, deportivamente hablando, fue exponencial. Ordás, lo analiza desde el ámbito nacional del deporte: “El remo en Argentina tuvo un crecimiento bastante grande en los ultimos años. Si bien a esta competencia no pudieron venir todos los representantes de la selección debido a una concentración, el nivel de remeros es muy bueno. Creo que es momento de seguir apostando a él”.
Después de representar a la Selección Argentina en los JJOO, la joven de 18 años analiza sus vivencias en esta clase de torneos nacionales que la tienen como habitual referente (ganó en doble y single este fin de semana) y confiesa: “El ‘body’ argentino te mete la presión de ganar. Acá se puede disfrutar mucho más del remado. La exigencia es la misma pero no tenes tantos nervios arriba”.
“El objetivo, como el de todos los remeros argentinos, es el Campeonato Argentino de Remo a fin de año”, apuntó María Sol en cuanto al objetivo anual y agregó respecto a su futuro con la Selección Argentina: “en el Sudamericano voy a tener la posibilidad de clasificación para Tokio 2020. Si bien soy chica y es un Juego Olímpico, quiero intentarlo”.