Reconocido mundialmente como el fisicoculturista más monstruoso del mundo, encontró su inspiración en esta disciplina al encontrar como referentes a figuras emblemáticas.
Según informa el medio Cba 24, el fisicoculturista checo Illia Golem falleció a los 36 años de edad por motivos aún desconocidos. Su primer objetivo deportivo era dedicarse al tenis de manera profesional. No obstante, encontró una inspiración vital en el fisicoculturismo, marcando a figuras como Arnold Schwarzenegger y Sylvester Stallone como auténticos referentes.
El fisicoculturista medía 1,85 metros, alcanzando los 165 kilos en su momento de volumen muscular más alto. Para alcanzar estas dimensiones, basaba su dieta en el consumo de calorías, llegando a obtener hasta 16.500 en un solo día. Para ello, repartía sus hábitos alimentarios en siete comidas, disponiendo grandes dosis de carne y sushi como elementos principales.
Según destacan fuentes de prestigio, podría haber recurrido a sustancias ciertamente peligrosas como Synthol, empleada para un crecimiento artificial de sus músculos.
Fuente y foto: Cba 24