El piloto salteño triunfó hoy en la novena etapa del rally más duro del planeta y escaló a la cuarta posición en la clasificación general, dominada el australiano Daniel Sanders (su compañero en KTM) quien terminó tercero a poco más de tres minutos del argentino.
Benavides, quien tuvo un maravilloso gesto antes de ganar la etapa 8 (paró y asistió al chileno Quintanilla quien estaba en el piso, descompensado, hasta la llegada del helicóptero con el cuerpo médico), está a 28 minutos del líder australiano y aún tiene tres días de competencia para tratar de alcanzarlo.
Luciano, un “ángel” en la octava etapa
Benevides, junto al francés Adrien Van Bereven, uno de sus rivales directos en la clasificación, detuvieron su marcha al ver a su par chileno en el suelo, en medio de la etapa.
La organización decidió eliminar el tiempo de detención tanto del argentino como del europeo, lo que determinó que el salteño ganara la etapa y el francés fuera segundo.
“Fue un día muy duro. Me sentía muy bien al inicio. Después del primer repostaje de combustible encontramos a Pablo (Quintanilla) en el suelo. Cuando llegamos estaba como dormido, pero estaba bien. Fue una situación difícil. Luego esperamos a que llegara el helicóptero. Lo ayudamos a ponerlo en la camilla y pudimos continuar. La verdad es que cuesta salir de una situación así y a fondo y bien”, explicó Luciano.