El festejo de Cambiemos en Carlos Paz fue desmembrado y los principales referentes locales de la lista que arrasó en las urnas de la villa llevándose el 58 por ciento de los votos no posaron juntos en ninguna foto.
Los hombres y mujeres de los distintos núcleos de la UCR, el Frente Cívico y las facciones del PRO locales, durante todo el domingo habían estado mostrándose los dientes, pugnando por el número de fiscales que había llevado uno u otro y hasta ladrándose en las escuelas ante la mirada atónita de los votantes, ciudadanos comunes, los mismos que en su mayoría le dieron el triunfo a la versión cordobesa de la alianza que gobierna en país.
“El triunfo no tiene un dueño local”, repitieron en los medios algunos referentes del espacio. Pero a la hora de calzarse el traje de ganador parece que todos quieren tener algo de la torta.
Es cierto, esa catarata de votos es atractiva para cualquiera y no hay político al que no lo seduzca aparecer en la foto bien cerca del que lo logró. Héctor Baldassi quedó en la línea de los candidateables para la Gobernación en 2019 y eso no es poco para los que quieren enrolarse entre los postulantes a suceder a Esteban Avilés en la ciudad.
Lo cierto es que, si bien lo hemos explicado antes, la conformación de Cambiemos y sus variables en Carlos Paz es por demás compleja. Y así como este lunes un diario cordobés se preguntó si no sería el presidente Mauricio Macri el que terminara por decidir quién será el candidato a gobernador de Córdoba de la coalición, no se sabe muy bien cómo se llegará a la determinación del postulante a la Intendencia por este espacio.
¿Se irá a internas? ¿Algún dirigente nacional o provincial designará al candidato? Nada de eso está claro aún como tampoco lo está qué papel jugará el intendente Avilés, amigo de los unos y los otros, los primeros y los segundos, en uno u otro espacio provincial o nacional.
Así de complejo es el ajedrez local que repite la historia de los grandes triunfos nacionales intentando traducirse en ciudades del interior.