Con la intención de paliar la crisis económica, el gobierno municipal implementó un Plan especial de deuda tributaria, que está vigente desde abril y concluye el 15 de octubre.
Según contó el secretario de Economía Daniel Gilli, este tiene un importante beneficio, que apunta a “dos vías, una hacia el vecino y para el municipio”, que necesita recursos en estos tiempos para poder continuar con la prestación del servicio.
La quita es del cien por ciento de interés, y en este punto destacó que “nunca” se había instrumentado una medida de esta naturaleza. De ese descuento, va bajando escalonadamente.
La respuesta del contribuyente es “buena”, aunque indicó que no se la puede comparar con años anteriores porque no cuentan con el dinero que podía ingresarle antes al vecino, actualmente es “de 30 millones de pesos”.
La recaudación, se divide “en recursos de coparticipación y propios, y estos últimos cayeron más que proporcionalmente, y esto debido a que hace cinco años, el gobierno municipal, al efecto de proteger a sus contribuyentes, viene realizando una adecuación de sus tasas inferior a la inflación. El mes de mayor caída fue mayo y abril, en junio y julio comenzó una recuperación. En términos reales en mayo, se acercó la caída a un 85 por ciento”, contó.
En términos de copartición la caída “fue menor, porque el gobierno de la Provincia mantuvo en términos reales, el poder adquisitivo de sus tributos acompañando la inflación. Nosotros que estuvimos por debajo hace que se sienta más la caída”.
Medidas e inversiones
En vista a las obligaciones, informó que están tratando de ponerse al día con la obra pública que se detuvo al inicio de la pandemia, y también continuarán con algunas que estaban empezadas, “cuyo costo de dejarlas, sería superior”.
Recordó que otra de las medidas que se pusieron en marcha, fue la prorroga en todos los vencimientos de las tasas de los diferentes sectores y para aquellos que si tenían recursos, también se les hizo un descuento del 40 por ciento.