Nació hace 7 años bajo el nombre de “Club Lechero”. Es una organización de Villa Carlos Paz se puso en marcha en marzo de 2011 con el ojo puesto en los más necesitados de la ciudad.
Pedro Dotta, su mentor, fallecido hace tres años, empezó a pura conciencia y corazón una empresa que a priori parecía imposible: recolectar leche entre los vecinos e instituciones para que nunca falte en los merenderos esparcidos por la villa.
Comenzaron con solo 4 litros de leche y hoy llevan más de 38 mil litros recolectados y repartidos.
Florencia Simon, la mujer de Pedro, estuvo siempre al lado de su marido, hasta el último día de su vida. Luego de su muerte, Jorge Humphreys se sumo a la Ong para que el sentimiento solidario siga vivo.
Su trabajo es recaudar leche de todos los colaboradores y repartirla a los merenderos de la ciudad. La única norma es no recibir dinero, sólo leche como un gesto solidario destinado a los chicos de los barrios más empobrecidos de Carlos Paz.
“Pedro me dejó este legado y esto no puede terminar. A él no le gustaría, desde arriba, que los chicos no tuvieran más leche”, explica Florencia quien contó cómo se logra esta multiplicación de gestos solidarios a Carlos Paz Vivo!
– ¿Cómo nace la idea del “Club Lechero”?
– Es una historia larga, mi marido fue a renovar el carnet de conducir y tuvo que hacer la entrevista psicológica y ahí es cuando él le comenta que necesitaba hacer algo, que estaba desocupado. La psicóloga lo alienta a que busque algún proyecto y, como el ya venía ayudando en Buenos Aires a “Caritas” con alimentos, esta vez se le ocurrió hacerlo con leche. Así fue que en ese momento comenzó a buscar merenderos que necesitaran leche. En su momento encontró un solo merendero y se abocó totalmente a ese, arrancando en marzo de 2011 con 4 litros de leche.
-¿Cómo es el proceso de recolección?
-Ese es el problema. Mientras Pedro Dotta vivió, se dedicó de lleno a este trabajo. Iba todos los días, casa por casa, a recaudar leche. Cuando Pedro murió y dejó de ir casa por casa, el adulto dejó de colaborar. El adulto colabora muy poco.
-¿Cómo llega Jorge a ser el encargado hoy del Club lechero”:
-Jorge aportaba leche cuando Pedro iba a recaudar casa por casa, y entre charlas y charlas, nació una buena relación. Dos meses antes de morir me dijo que quería pasarle todo a Jorge por si a él le pasaba algo. Yo creo que fue un mensaje divino, porque él no sabía que iba a morir y no hubiera querido que esto desapareciera. Él quería que Jorge tuviera todos los datos y estuviera al tanto. A pesar de que Jorge es ya un hombre mayor, asumió el compromiso y es él quien recibe la leche en su casa y la clasifica por fecha de vencimiento.
Siempre necesitamos recaudar más, porque los merenderos tienen que rebajarla con agua para que alcance para todos.
-¿Cuántos litros de leche se entregan por mes?
-Se están entregando alrededor de 600 litros por mes abastecidos por el Instituto Parroquial Bernardo D’Elia y el Instituto IRESM. Yo soy profesora de los dos institutos y los directivos me permiten recolectar leche en las escuelas. Los chicos son muy solidarios y ayudan mucho, desde el aporte del litro de leche hasta repartirlos con sus camionetas a los merenderos. En una cantidad de 600 litros de leche, 400 son aportados por los chicos y 200 por los adultos. ¡Una maravilla! Siempre necesitamos recaudar más, porque los merenderos tienen que rebajarla con agua para que alcance para todos.
Los interesados en colaborar con este club de amor y solidaridad pueden hacerlo en distintos puntos receptores de la ciudad o comunicándose al 3541-678368:
Farmacia Cárcano
Almacén El Vergel
Estudio Calderón Delgado
La casa de Florencia Simón de Dotta (Tupungato 860 – Departamento 3)
TecnoGraf