En un hecho inédito, el Estado Islámico atentó en la República Islámica de Irán, en dos ataques cometidos por “combatientes” del EI, según publicó hoy la agencia de noticias Amaq, habitual medio de difusión de la organización yihadista.
Al menos ocho personas murieron y 10 resultaron heridas hoy cuando varios hombres irrumpieron a tiros en el Parlamento iraní y un atacante suicida se inmoló en el mausoleo del imán Ruholá Jomeini, dos ataques reivindicados por el Estado Islámico (EI).
En un hecho inédito, el Estado Islámico atentó en la República Islámica de Irán, en dos ataques cometidos por “combatientes” del EI, según publicó hoy la agencia de noticias Amaq, habitual medio de difusión de la organización yihadista.
El primer ataque se produjo a las 10.30 hora local (3 de la madrugada en la Argentina), cuando cuatro hombres armados irrumpieron en el Parlamento, mataron a siete personas, entre ellas un guardia de seguridad, y tomaron de rehenes a varias más, según fuentes parlamentarias citadas por las agencias semioficiales ILNA y Tasnim.
Dos horas después de la toma de dicha sede, en pleno centro de Teherán, uno de los atacantes hizo estallar los explosivos que llevaba, según informó la televisión estatal iraní.
Las puertas del Parlamento han sido cerradas y no se permite la salida ni a los diputados ni a los periodistas allí congregados, lo que ha aumentado la confusión en torno a lo acontecido y a cuál es la situación ahora.
La agencia de noticia EFE, indicó que la parlamentaria Tayebé Siavoshí declaró que la situación es muy confusa y delicada, negando informaciones preliminares de que todo estaba bajo control.
Según la agencia semioficial ISNA, uno de los atacantes a la sede parlamentaria fue detenido.
Poco después, se produjo otro ataque en el emblemático mausoleo del imán Ruholá Jomeiní, fundador de la República Islámica de Irán en 1979, en el que uno de los empleados del lugar falleció y cuatro peregrinos resultaron heridos, según consignó Tasnim.
Dos de los agresores, uno de ellos una mujer, fueron detenidos por las fuerzas de seguridad, mientras que otros dos se inmolaron durante el ataque.
Fuentes oficiales informaron que previo estos ataques, una célula terrorista fue desarticulada en el país y sus miembros detenidos, aunque no hay información sobre la relación entre ese grupo y los atacantes de hoy.
Este es el primer ataque de este tipo que se produce en Irán, cuyas autoridades han reforzado las medidas de seguridad en torno a los edificios oficiales como la sede de la Presidencia.