Los incendios forestales que se dan en la zona perjudican directamente a los ríos y el lago San Roque de una manera directa. Según informaron desde la Dirección de Ambiente del municipio, es muy alta la contaminación que provocan.
Dos incendios siguen activos por estas horas en la zona de Tanti y cerca de Las Jarillas. Las consecuencias que dejan no son alentadoras, ya que provocan un impacto negativo en el medio ambiente.
Personal de la Dirección de Ambiente, Ejido y Desarrollo Sustentable del municipio, resaltó que el incendio que se produjo la semana pasada en Copina, fue por ejemplo, de mayor dimensión de lo que es nuestro lago, ya que lo “superó en hectáreas”.
Estos focos ígneos provocan una gran pérdida de bosque nativo y con ello “de fauna, que son nuestros dispersores de semillas”. Y agregaron que de esta manera el suelo queda expuesto.
“Primero entonces se da una contaminación atmosférica; todo ese humo con cenizas y materiales va a parar al suelo. Cuando llueve se producen correntías, porque el suelo quedó desnudo, y no hay vegetación que pueda contener esas precipitaciones, por lo tanto arrastra todo eso al río y al lago”, indicaron.
Estos últimos incendios forestales se produjeron en la cuenca de nuestros principales afluentes, que son el San Antonio, Las Mojarras y los Chorrillos en el caso de Tanti.
El material que se genera de los incendios, y que queda en el suelo, termina llegando al lago San Roque y provoca una importante contaminación, “aumentando la eutrofización y como consecuencia, hay más probabilidades de un bloom de algas”, informaron desde el área de Ambiente.
Y resaltaron por último: “El bosque nativo tiene un desarrollo de un tiempo muy alto, hay especies muy longevas como el molle o el coco, que tienen entre 70 y 120 años, y para que se recupere un bosque maduro, implica todo ese lapso. Lo ideal es tener mayor cantidad de áreas protegidas”.