El proyecto presentado por la diputada De la Sota fue aprobado por unanimidad y pasó al Senado para su tratamiento. Promueve la capacitación y formación obligatoria, permanente y actualizada en materia de discapacidad de los agentes públicos de los tres poderes del Estado y la accesibilidad universal y adecuación física y comunicacional de los espacios públicos.
La Cámara de Diputados dio media sanción hoy al proyecto que crea el programa “Argentina Inclusiva”. La norma fue sancionada por unanimidad (243 votos) y pasara ahora al Senado para su tratamiento. El texto aprobado promueve la capacitación en materia de discapacidad de toda la planta de personal del Estado nacional en todas sus jerarquías y el diseño universal de espacio públicos. Unos 60 representantes de distintas organizaciones del país acompañaron el debate desde los palcos del recinto.
La diputada Natalia de la Sota, autora del proyecto, fue una de las encargadas de exponer los alcances del programa. Al inicio, sostuvo que “como sociedad nos falta aún transitar un larguísimo camino para la inclusión y la convivencia real y efectiva de las personas con discapacidad. Nos cuesta mucho todavía individualmente y como sociedad abrazar de verdad a la diversidad”.
“Argentina inclusiva – continuó la diputada – propone que nos animemos a mirar a la discapacidad, que nos animemos a conocer, a aprender, porque lo que no conocemos, lo que no asumimos como parte nuestra, no nos atraviesa y no nos interpela. Esta ley nos invita a darnos, además, un baño de humildad y a reconocernos ignorantes en la materia porque solo generando cambios profundos en la percepción de que el otro somos nosotros vamos a poder construir sociedades más sanas y más justas”, indicó.
En otro tramo de su mensaje, De la Sota expresó: “Para que resulte más claro aún, a partir de la sanción de esta Ley, desde la persona que abre la puerta en un organismo público, hasta el presidente de la Nación, deberán formarse en trato adecuado, deberán saber cómo dirigirse, cómo tratar a una persona con discapacidad, de qué manera comunicarse, cómo orientarla, cómo asesorarla y deberán saber también cuáles son las condiciones de accesibilidad universal que debe tener el espacio público en el que trabajan”, subrayó.
“Yo creo en un Estado presente”, enfatizó De la Sota. “Creo en el rol fundamental que debe cumplir el Estado en esta materia, creo en un Estado que abrace, que cuide y que vele por los sectores de la sociedad que están excluidos y segregados”, apuntó.
De la Sota consignó distintos casos recientes de discriminación e ignorancia. “Asombra que aún tengamos que escuchar algunas manifestaciones que rayan lo grotesco. En mi provincia hace poco un candidato acompañó con mucho orgullo a su hija que tiene una discapacidad a votar por primera vez y tuvimos que escuchar de otra candidata críticas y cuestionamientos, llegando a decirle por qué la mostraba, que era una bajeza, que por qué no la dejaba en su casa. Otro candidato comparó hace días a la discapacidad con la homosexualidad y escuchamos también de un integrante de esta Cámara usar el término ´mogólico´ para defenestrar a un oponente político.