El presidente Alberto Fernández inaugurará este domingo el 138° período de sesiones ordinarias del Congreso Nacional con un discurso en el cual trazará los principales ejes de su gestión, expondrá las prioridades de su gobierno en materia de renegociación de la deuda y lucha contra la pobreza, y en el que, según ya se anticipó, anunciará el envío al Parlamento de un proyecto de reforma judicial, de legalización del aborto y un plan para asistir a madres vulnerables.
Será la primera vez que Fernández deje abiertas las sesiones ordinarias, que se desarrollan entre el 1 de marzo y el 30 de noviembre, y la segunda vez que expondrá ante la Asamblea Legislativa, ya que lo hizo el 10 de diciembre cuando asumió la Presidencia de la Nación.
El jefe de Estado pronunciará su discurso en un recinto de sesiones que contará con la presencia de ministros y funcionarios del gobierno, mandatarios provinciales, los jueces de la Corte Suprema, embajadores e invitados especiales.
En las inmediaciones del Congreso habrá una marcha para expresar el respaldo al Presidente, convocada por organizaciones sociales y políticas.
Fernández expondrá desde el mediodía ante la Asamblea Legislativa que se realizará en el recinto de sesiones de la Cámara de Diputados, que será presidida por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Los ejes del discurso
Fuentes parlamentarias señalaron que los ejes centrales de su discurso se centrarán en las prioridades que tiene el Gobierno en materia de la renegociación de la deuda pública, la reactivación de la obra pública, su lucha contra la pobreza y la distribución de la tarjeta Alimentar en todo el país, en el marco del plan Argentina contra el Hambre, que ya cuenta con un total de 922.000 plásticos activos en todo el país, con 2.800.000 niños involucrados.
Además, como se adelantó en las últimas semanas, el jefe de Estado anunciará que girará al Congreso los proyectos de legalización del aborto y otro de maternidad sustentable, que incluye el denominado “Plan de los 1000 días”, que busca garantizar la asistencia de madres vulnerables desde el embarazo hasta los 2 años del niño.
“Va a ser legal la interrupción del embarazo”, dijo en los últimos días el ministro de Salud, Gines González García, al confirmar el envío “inminente” de la iniciativa del Poder Ejecutivo.
También el Presidente podría anunciar modificaciones en el sistema de adopción para mejorar y acelerar los mecanismos que existen actualmente en el país, dijeron fuentes oficiales.
“Tenemos que garantizarle a todos, todo: a la mujer que quiera abortar, que pueda hacerlo y a la mujer que quiera tenerlo, que pueda tenerlo. Esto quiere decir generar un debate sobre las familias de tránsito, definir mecanismos rápidos de adopción y también mejorar la educación anticonceptiva”, había asegurado el Presidente en declaraciones de sus primeros días de gobierno.
En su mensaje del domingo, el jefe de Estado buscará impulsar ambos proyectos -el del aborto y el de maternidad sustentable- para que se traten en conjunto, con la idea -en parte- de contener a los sectores enfrentados en el tema, bien visibles durante el frustrado debate del 2018, cuando la legalización del aborto se aprobó en Diputados pero fue rechazada en el Senado.
Por otro lado, el Presidente confirmó el viernes que también anunciará el envío de un proyecto de reforma judicial con el objeto de “empezar a ordenar a la justicia federal” y, en ese marco, señaló que “llegamos a un punto en donde las cosas no están funcionando bien y la justicia se aleja, en términos económicos, del resto de la Argentina”.
En las últimas horas, el Presidente estuvo analizando con sus principales asesores los aspectos centrales del discurso que pronunciará ante la asamblea convocada para el domingo al mediodía.
El jefe de Estado pronunciará su discurso en un Congreso donde el Frente de Todos es mayoría en el Senado Nacional y primera minoría en la Cámara de Diputados, donde existe una virtud paridad entre el oficialismo y Juntos por el Cambio y allí se viven las mayores tensiones políticas.
Esa situación quedó evidenciada hace cuatro días en la Cámara de Diputados, donde se aprobó la reforma de las jubilaciones de privilegio de la justicia y del servicio exterior, en el marco de una tensa sesión por las denuncias de Juntos por el Cambo de anomalías por la conformación del quórum.