De entre todos los juegos de casino, el póker es el que dispone de mayor popularidad. Ha tenido una gran influencia sobre la sociedad, entrando en contacto con el cine, la música y el lenguaje. En esta pieza, presentamos una serie de referencias presentes en el campo de la creatividad y la expresividad social, vinculadas directamente con este pasatiempo.
Cine
Si hemos mencionado que el póker es uno de los referentes dentro de los juegos de naipes, el cine lo es en la creación cultural. Conocido como el séptimo arte, nos ha ofrecido infinidad de historias y viajes. Muchas películas han utilizado este juego como fondo argumental, como es el caso de Maverick, obra estrenada en 1994. En este largometraje, vemos como Richard Donner dirige de manera soberbia a Mel Gibson, dando origen a uno de los westerns más memorables de la última década del siglo XX. El protagonista es un jugador de cartas que intenta vencer a los rivales con el uso del póker.
Otro buen ejemplo es Rounders, de 1998. Esta obra cuenta con Matt Damon en el papel principal. Aquí, el protagonista regresa a la práctica del juego tras un parón temporal. Es una ficción que muestra muy bien la idiosincrasia del póker, ya que no escatima en detalles visuales.
Como referencia más moderna, es importante destacar Casino Royale, un film de 2006 que se incluye dentro de la famosísima saga James Bond. Protagonizada por Daniel Craig, es una de las mejores obras de la franquicia. Fue la primera que contó con Craig como primera espada, tomando el relevo de Pierce Brosnan. El póker es una herramienta narrativa que se usa para que la trama avance, ya que uno de los momentos más destacados del film es cuando Bond debe imponerse a su rival en una partida. Está grabada con gran maestría y la crítica destacó su perfección técnica.
Música
Nos alejamos del cine para entrar en el mundo de la música. En relación con este segmento, una de las canciones más populares es “Poker Face”, de la polifacética Lady Gaga. En este tema, se usa el hieratismo facial habitual en las partidas para aportar un halo misterioso. Hace referencia también al Texas Hold ’em, una de las variantes más extendidas en las salas de todo el mundo.
Si se analizan las reglas, se puede comprobar como la escalera de color es una de las mejores combinaciones dentro de la escala del póker y, seguramente por eso, el grupo Hombres G la menciona en su canción “Vente pa’ Madrid” con el siguiente fragmento: “Tengo preparada una escalera de color y tú me haces sentir mejor”. Hay que obtener cinco cartas consecutivas del mismo palo para construir esta mano, dejando entrever que se dispone de una posición de privilegio.
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Ponemos punto final a nuestras referencias musicales con el tema “Ace of Spades”, de la banda británica Motörhead. En este caso, el grupo de heavy británico habla de la gestión de las partidas, tomando como título una de las cartas presentes en la baraja: el as de picas, una pieza que representa como pocas todas las características que hacen del Hard Rock un género único: guitarras pesadas, baterías perfectamente acompasadas y una voz rota absolutamente inconfundible. El grupo inglés ha tenido una gran influencia en el mundo de la música, rompiendo los límites de su campo.
Arte y pintura
El arte es otro de los campos que se ha visto influido por el póker. Las partidas suelen presentar una distribución circular a lo ancho de la mesa, lo que las convierte en un buen punto de partida artístico. Una de las series más conocidas es la que pintó Cassius Marcellus Coolidge. Este artista americano, que pasó toda su vida en Nueva York entre 1844 y 1934, es famoso por pintar una serie de dieciséis cuadros que muestran a perros realizando actividades propiamente humanas. En algunas de ellas se pueden ver a los cánidos jugando al póker.
Unas representaciones muy curiosas que todavía hoy en día continúan llamando la atención. Una de las más famosas es “A Friend in Need”, que refleja una partida con todo lujo de detalle.