El concejal Daniel Ribetti (Carlos Paz Despierta) se manifestó en contra de la nueva disposición que se dio a conocer luego de la aprobación de la Ordenanza Tarifaria que contempla el cobro de una tarifa por las prácticas que se realicen en el Hospital Municipal Sayago quienes no tengan domicilio en Carlos Paz.
En un escrito, el edil señaló: “Esta decisión, presentada como un intento de aliviar las finanzas municipales y proteger los recursos locales, carece de argumentos sólidos y parece más un movimiento político que una medida seria de gestión pública”.
El edil expresó: “No estamos ante una crisis financiera que justifique este cobro. En 2025, el municipio dispone de $81,000 millones, una cifra que refleja un crecimiento presupuestario del 118% respecto al año anterior, muy por encima de la inflación interanual estimada en 55%. Sin embargo, esta abundancia presupuestaria no se traduce en una administración eficiente”.
Planta de empleados
Por otro lado, expresó que Carlos Paz “tiene un empleado municipal por cada 38 habitantes, uno de los índices más altos del país”.
“Este ejército de trabajadores consume más del 63% del presupuesto en salarios, gastos corrientes como la cuenta de Cotreco y pago de deudas. Además, la gestión de Avilés se caracteriza por un uso discutible de recursos públicos: los fuegos artificiales de fin de año, que costaron $15 millones en apenas diez minutos, podrían haber financiado la atención de 3,000 turistas en la guardia del hospital a $5.000 c/u”, indicó.
Un argumento sanitario inexistente
“Desde el punto de vista sanitario, tampoco hay justificación para esta medida. El gobierno local no ha presentado estadísticas que cuantifiquen la demanda de los municipios vecinos, que cuentan con sus propios sistemas de salud, ni ha demostrado el impacto económico que supone atender a los turistas”, dijo Ribetti y añadió. “Si estos datos existieran y fueran significativos, se habrían expuesto y en la sesión no los mencionaron”.
Para el concejal de Carlos Paz Despierta, el planteo significa una “jugada política”.
“Al electorado libertario local le ofrece una medida populista de derecha, bien vista entre quienes respaldan las políticas de cobro a los no residentes, aunque en este caso se trate de turistas nacionales y de vecinos de San Antonio o Cuesta Blanca”, señaló el edil y agregó:” Al gobernador de la provincia, le insinúa que el hospital municipal, ya demasiado grande para su gestión, debería pasar a manos provinciales y entre líneas pide más plata”.
Para Ribetti, el intendente Avilés “intenta reposicionarse ideológicamente hacia el libertarismo, pero sus acciones desmienten su narrativa”.
Y siguió: “La salud pública no puede ser un instrumento de especulación política ni una herramienta para generar incertidumbre en vecinos y turistas. Usar el hospital y la atención médica como excusa, en un contexto de crisis con altos niveles de vulnerabilidad social, para enviar mensajes políticos es, como mínimo, irresponsable y vergonzoso, este tipo de situaciones se arreglan con gestión, dialogando en serio con los otros órdenes de poder, provincia y nación y no con este show patético e infantil”.
“Avilés pretende vestirse de libertario, ponerse la peluca, pero su gestión lo pinta como todo lo contrario: un político que prioriza el espectáculo sobre las prioridades, y que está dispuesto a sacrificar la confianza en el sistema de salud por un titular pasajero”, remató.