Si pasara en tiempos de “normalidad” el conflicto sería tapa de todos los diarios. Sin embargo, como sucede con tantas cosas desde que surgió la pandemia de coronavirus, el paro por tiempo indeterminado de los choferes del transporte urbano de Carlos Paz y los interurbanos persiste desde hace 11 días y no tiene en el horizonte una solución.
Punto por punto
El reclamo de los choferes nucleados en AOITA es por el pago de la totalidad de los haberes del mes de marzo.
Las empresas argumentan que al no tener facturación por la estrepitosa caída de la recaudación no pueden hacer frente a la totalidad del depósito de sueldos de sus plantas de personal.
Los choferes plantean que las empresas reunidas en FETAP cobraron la totalidad de los subsidios que la Nación y la Provincia le otorgan a los servicios que prestan.
Los empresarios, en tanto, argumentan que ese dinero no les alcanza para hacer frente a los gastos que representa mantener la planta de personal, los insumos y los demás ítems que deben afrontar.
Desde el gremio AIOTA aseguran que si no pudieron pagar los sueldos cuando trabajaron 20 días de marzo con relativa normalidad, el panorama se pondrá más oscuro en mayo, ya que en abril prácticamente no llevaron pasajeros.
Sin diálogo
Desde ambas partes hablan de falta de diálogo y hay críticas desde el sector empresario hacia la falta de compromiso del Gobierno provincial y del local, en el caso de Carlos Paz, para llegar a un acuerdo que permita recuperar un servicio básico para los vecinos.