Al menos cuatro personas resultaron heridas cuando la policía de Santa Cruz reprimió una manifestación que, pasada la medianoche del viernes, intentó ingresar a la residencia oficial de la gobernadora Alicia Kirchner, en Río Gallegos, en reclamo del pago de haberes adeudados, luego de difundirse que la ex presidenta Cristina Kirchner había llegado al predio.
Tres heridos se registraron en el primer accionar de la Infantería, pasadas las 0,30, sobre el portón de la calle Piedra Buena, frente a la Jefatura policial, hacia donde se habían volcado los efectivos para dispersar a los manifestantes que lograron franquear la reja del otro ingreso hacia los jardines de la residencia oficial.
“Quieren mi cabeza”, dijo Alicia Kirchner
Así se refirió esta mañana por Radio 10 luego de la manifestación que se produjo anoche y que arrojó un saldo de al menos cuatro personas heridas cuando la policía local reprimió una manifestación espontánea que intentó ingresar a la residencia oficial de la gobernadora, en Río Gallegos, en reclamo del pago de haberes adeudados.
Alicia Kirchner apuntó contra “los candidatos de la obstrucción o de la destrucción” y contra la Asociación Docentes de Santa Cruz (ADOSAC), el gremio mayoritario de los maestros en conflicto que no asistió a la mesa del pacto social santacruceño, como instigadores del “ataque” a la residencia oficial. “Quieren mi cabeza para la campaña electoral nacional”, afirmó.
Kirchner explicó que la provincia está quebrada y que no está “contra los docentes, que quede bien claro, sí con algún sindicato como es ADOSAC, que no tiene nada que ver con otros sindicatos docentes, que está permanentemente instigando y diferenciando”.
“Creo que hay una intencionalidad de decir todo lo que ha sido el proyecto nacional, que condujo primero Néstor y después Cristina, que ha sido malo, hay una clara intencionalidad de poner el foco en esa realidad”, afirmó Alicia Kirchner más adelante en la entrevista.
La mandataria dijo desconocer el detonante de la manifestación, y aseguró que la ex presidenta Cristina Fernández “está preocupada sabiendo que quieren mi cabeza y siempre hostigando lo que fue el proyecto nacional”.