En la mañana del lunes, la aparición de un zorro gris en un restaurante de la costanera cercano al centro, llamó la atención de uno de sus propietarios. Ante la presencia inusual de este animal, el hombre decidió contactar a algún organismo oficial para ayudarlo, algo que resultó una misión imposible.
“Yo sabía que si lo espantaba, iba a terminar perdido en la ciudad, estaba muy asustado y desorientado”, relató el propietario del comercio gastronómico.
Si bien es habitual la presencia de zorros grises en todas las zonas aledañas al campo o la sierra, donde el animal es autóctono, y suelen acercarse a la población para comer de la basura, su presencia en una zona tan urbana, asfaltada y alejada a las sierras, llamó la atención del hombre, que prefirió no revelar su identidad.
Lo que continúa, es el relato del comerciante ante su fracasado intento de protección del animal.
“Lo primero que hice fue llamar al 147, que es el número de Seguridad Urbana, donde dicen que hay que llamar por cualquier contingencia. Me atendió un pibe que me dijo que no tenía idea que podían hacer con esta situación, que esperara que ya me iba a llamar”, inicia el relato..
Ante la falta de una respuesta concreta, el comerciante decidió pedir ayuda: “Fue entonces que consulté a un amigo que podía llegar a saber, él se contactó con el veterinario de la muni, quien le dijo que no podían tocarlo al zorro por tratarse de un animal autóctono y por lo tanto protegido. Y que tampoco hiciéramos nada nosotros porque al ser una especie canina salvaje por lo que podía tener rabia y ser un peligro para la salud pública. Él nos recomendó llamar a la Patrulla Ambiental, que depende de la policía”.
La llamada fue efectuada con respuesta similar: “Espantalo”, fue lo primero que le dijeron desde la Patrulla Ambiental. Ante la explicación de que el comercio se encontraba en pleno centro que lo más probable que de escaparse el animalito terminara “cazado” por algunos perros callejeros o debajo de un auto, el operador le contestó que lo llamaría más tarde.
“A las dos horas cayeron los bomberos de Carlos Paz, intentaron atraparlo y como el animal se fue y se asustó, se fueron como si nada: ‘Ya nos llamarán de otro lado que apareció’, contestó uno de los bomberos en su retirada”.
Advertidos de toda esta situación, CarlosPazVivo! se comunicó con Adrián Rinaudo, director de la Policía Ambiental, quién sin mediar justificativo alguno, señaló: “Ya le paso a los inspectores nuestros y vemos si lo ubicamos para trasladarlo a un lugar lejos del centro poblado y lo liberamos”.
“Si era para espantarlo, lo espantaba yo a la mañana. Yo quería protegerlo, ver qué se podía hacer. Al final estuve hasta pasado el mediodía sin abrir para que no se escape y vinieron ellos y lo echaron así nomás”, contó en tono de decepción el comerciante.
La situación desnudó una falta absoluta de previsión y protocolos de acción por parte de los estamentos estatales responsables.
