El Vaticano dio a conocer este martes detalles íntimos del último domingo del Pontífice, desde su conmovedor gesto en el papamóvil durante la misa Pascual hasta los instantes finales en la Casa Santa Marta.
En la comunicación oficial, se reveló además cuáles fueron sus últimas palabras y a quién estuvieron dirigidas.
“Gracias por devolverme la Plaza”. Con estas palabras, llenas de gratitud y ternura, el papa Francisco se dirigió a su asistente personal de salud, Massimiliano Strappetti, el hombre que lo acompañó en su camino final, y que lo animó a realizar lo que sería su última aparición pública durante la Misa de Pascua.
El Pontífice, de 88 años, había salido por sorpresa en el papamóvil la mañana del domingo 20 de abril, desatando la emoción de los más de 50 mil fieles reunidos en la Plaza de San Pedro. Fue su primer paseo tras la internación en el hospital Gemelli, y también, el último.
Según fuentes cercanas al Vaticano, Francisco dudó hasta último momento: “¿Crees que podré hacerlo?”, preguntó a Strappetti. La respuesta afirmativa lo impulsó a ese gesto característico de su pontificado: la cercanía.
Con su rostro iluminado por una serena alegría, saludó con especial afecto a los niños. Ese contacto directo con la gente era su esencia, y él lo sabía.
Strappetti no fue un asistente más. Había ganado la confianza del Papa desde 2022, tras sugerirle una operación de colon que le prolongó la vida. También estuvo a su lado durante los 38 días de hospitalización y en su recuperación en Santa Marta.
Después de ese emotivo recorrido, Francisco descansó por la tarde y compartió una cena tranquila. Nada hacía presagiar el desenlace.
Pero en la madrugada del lunes, alrededor de las 5:30, comenzó a sentirse mal. Fue atendido inmediatamente, pero su salud ya no resistió. Luego de despedirse con un gesto afectuoso de Strappetti, cayó en coma y falleció poco más de una hora después. Las fuentes aseguran que fue una muerte serena, sin dolor.
