El estallido social que se produjo este miércoles por la tarde tras la manifestación frente a la Comisaría local provocada por el crimen de Franco Amaya tuvo su consecuencia directa en la Departamental Punilla. La Jefatura de la Policía y el Gobierno provincial decidieron apartar a Ángel Costero, jefe de la Departamental, un par de días después de que a su segundo, Carlos Destefanis, le pasara lo mismo aunque por otros motivos.
La conmoción provocada por la muerte del joven se extendió ayer a las redes sociales desde donde se generó la protesta que terminó con piedrazos contra el edificio de la Departamental. Costero había asumido su cargo días antes del inicio de la temporada en reemplazo de Guillermo Cortés, quien se jubiló.
Así se producían los incidentes: