Hace 5 años moría Luis Alberto Spinetta, un músico que, a partir de una carrera brillante, plagada de inspirados discos en donde combinó sutiles melodías y armonías con poéticas letras, influidas en muchos casos por filósofos, pensadores y poetas, y una postura intransigente ante los permanentes intentos del mercado por banalizar las expresiones artísticas, dejó un invaluable legado que sienta un precedente difícil de ignorar para sus colegas.
A lo largo de más de 40 años desde su aparición pública en 1969, tanto al frente de memorables e iniciáticas bandas como Almendra, Pescado Rabioso, Invisible o Spinetta Jade, como en su etapa solista, con 35 discos editados, Spinetta logró posicionarse como el máximo referente del rock argentino, junto a Charly García y Pappo.
La obra de este artista se caracterizó fundamentalmente por la búsqueda musical incansable, con un alto valor estético como guía; y el alto nivel poético en sus letras, influenciadas por pensadores como Friedrich Nietzche, Michel Foucault, Carlos Castaneda y Carl Gustav Jung, y artistas de diferentes disciplinas como Vincent Van Gogh, Arthur Rimbaud y Antonin Artaud, entre otros.
A pesar de que su carrera también se caracterizó por el escaso impacto comercial de sus discos y sus conciertos, acaso producto de su negativa a realizar concesiones creativas ante el mercado, su figura se convirtió en un referente para todos los músicos del país, más allá del género que cultiven.
Sin embargo, como suele ocurrir en muchos casos a lo largo de la historia, las ventas de discos de Spinetta se dispararon en los últimos años, como así también la difusión de su obra, luego del triste 8 de febrero de 2012, cuando su cuerpo perdió la silenciosa batalla contra un cáncer de pulmón que, sin éxito, trató de mantener lejos de los flashes de los medios.
Con clásicos como “Muchacha ojos de papel”, “Ana no duerme”, “Plegaria para un niño dormido”, “Fermín”, “Figuración” y “Laura va”, el primer disco de Almendra, editado en 1969, creó todo un imaginario artístico que marcó para siempre la obra de Spinetta.