A más de un año de la muerte de Carina Drigani, la fisioterapeuta cordobesa que fue hallada sin vida en un arroyo de Icho Cruz, se confirmó la elevación a juicio de la causa que investigó la fiscal María de las Mercedes Balestrini.
La jueza de control Cristina Giordano confirmó las actuaciones de la fiscal, por lo que decidió la elevación a juicio del caso por femicidio que tiene como principal acusado e imputado a Hugo Salas, última pareja de Drigani.
La fisioterapeuta fue hallada muerta en un arroyo de la localidad del sur del Valle de Punilla el 5 de mayo de 2016. La autopsia realizada en el cuerpo de la mujer determinó que murió por asfixia producto de la sumersión.
Salas, de 73 años, se encuentra privado de su libertad en prisión domiciliaria, debido a razones de salud, informó La Nueva Mañana en un artículo publicado este lunes.
El abogado querellante de la familia de Drigani será Carlos Nayi, quien explicó que las pericias habían detectado además “15 señales que indican castigo y sumisión, equimosis, cortes, micro y macro traumatismos que recorren todo su cuerpo. Fue castigada, torturada, sometida y finalmente fue asesinada”.