Los habitantes de una zona rural de la Pampa de Achala, en la pedanía de Ambul, manifestaron su preocupación por el deterioro del camino que conecta el cruce Mina Arauco, conocido como “El Volcán”, con la entrada al colegio Liqueno, en Puerta Negra. A través de las redes sociales, los vecinos compartieron imágenes del lugar y expresaron su malestar ante la falta de mantenimiento y el riesgo que esto implica.
Según explicaron, las lluvias recientes han agravado el problema, aunque destacan que el estado actual del camino no se debe únicamente a cuestiones climáticas, sino también a la ausencia de desagües, alcantarillas y trabajos estructurales. “No se puede ni caminar. Pareciera que están esperando que pase una desgracia para arreglarlo”, comentó uno de los habitantes afectados.
El camino, que resulta esencial para los residentes, conecta a varias familias, muchas de ellas con personas mayores y en situación de vulnerabilidad. La falta de acceso adecuado no solo afecta el tránsito cotidiano, sino también la posibilidad de que vehículos de emergencia puedan ingresar en caso de necesidad.
Lucía, una madre que vive en la zona, compartió su experiencia sobre las dificultades que enfrentó el año pasado al llevar a su nieta a la escuela en El Volcán. “El camino no es que estuviera un poco en mal estado, estaba intransitable en varios tramos. Incluso había barrancas peligrosas. Muchas veces he tenido que llevar pico y pala para arreglar partes del camino con mis propias manos. En algunos casos, llegué a cargar la camioneta con basura para rellenar los lugares donde era imposible pasar”, relató.
“Yo,siendo mujer lo he tenido q arreglar en un montón de oportunidades porque sinó rompo mi vehículo y lo necesito para trabajar y llevar la nena a la escuela también. Hice reclamos a vialidad provincial el año pasado, hasta me ofrecí para arreglar los tramos en peor estado y no me dieron ninguna repuesta” dijo Lucía a Carlos Paz Vivo!
La mujer también señaló que la falta de alcantarillas y desagües agrava la situación: “El agua siempre busca los lugares más bajos y, en lugar de levantar el camino, cada vez lo cavan más, haciéndolo más profundo y peligroso. Es desesperante para quienes vivimos aquí y necesitamos transitar estos caminos todos los días”.
En su reclamo, los vecinos señalaron que las soluciones aplicadas hasta el momento han sido insuficientes. “Cuando dicen ‘lo estamos arreglando’, lo que hacen es una escarbada de gallina”, manifestaron. Solicitaron que se tomen medidas urgentes para garantizar la transitabilidad y que, de ser necesario, se delegue la tarea a otros equipos con mayores recursos.
En esta región de las Sierras Grandes, el mantenimiento del camino no solo es esencial para quienes residen allí, sino también para el desarrollo del turismo y la conexión con servicios educativos y de salud. Los vecinos piden difusión del problema para que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto.