La consigna pareció no ser otra que: “busquemos un río o cualquier charco para tirarnos que no se aguanta el calor”.
Y todos los balnearios de Carlos Paz y la región se repletaron de turistas y de vecinos que no pudieron hacer otra cosa que aprovechar los ríos de la zona para calmar un poco al menos el calor.
La térmica trepó por encima de los 33 grados y se hizo sentir en las calles de la ciudad.
Las piletas de los hoteles también estuvieron colmadas de turistas.
Este domingo se espera otro día de altas temperaturas en la región.