La catástrofe desatada tras la explosión el martes último en el puerto de la capital libanesa, Beirut, y la emergencia sanitaria provocada, hacen temer una disparada de casos de coronavirus en el país, advirtió este jueves el gobierno.

Así lo señaló el ministro de Salud de aquel país, Hamad Hassan, quien aseguró que la necesidad de dar prioridad a la atención de los más de 5.000 heridos que causó la devastadora explosión hace temer “aumento de los enfermos en los próximos días”.

Hassan señaló, asimismo, que a raíz de la explosión se perdieron equipos de protección en el sistema de salud, por lo que el Gobierno quiere que los hospitales de campaña que se están levantando también atiendan los casos de coronavirus.

Cabe destacar que los hospitales de la capital libanesa quedaron colapsados en las horas inmediatamente posteriores a la tragedia, con miles de personas llegando con heridas de diversa consideración.

Las autoridades de la Gobernación de Beirut informaron que los daños podrían rondar los 3.000 o 5.000 millones de dólares y que aún hay alrededor de un centenar de desaparecidos.

El país está de luto oficial de tres días desde este miércoles y la capital libanesa se encuentra en estado de emergencia bajo la supervisión de las Fuerzas Armadas, encargadas del mantenimiento del orden.