El intendente de Villa Carlos Paz, Esteban Avilés, detalló este miércoles “las graves deficiencias” encontradas en el sistema de cloacas de la ciudad y la determinación del municipio de avanzar con una denuncia penal contra la Cooperativa Integral.
En este marco, se declarará también la emergencia ambiental en la ciudad, ante la situación crítica que enfrenta el sistema de tratamiento de efluentes y la salud pública.
“El proceso de gestión de las plantas de tratamiento, en su mayoría, no ha podido cumplir con los estándares establecidos, lo que ha provocado un deterioro evidente”, expresó Avilés, quien confirmó que por esta razón no se pudo asumir el servicio el pasado 3 de marzo.
Análisis exhaustivo
Según lo señalado por el intendente este miércoles, tras un exhaustivo análisis realizado por la Secretaría de Obras y Servicios Públicos, liderada por Carla Livelli, y el experto contratado para evaluar la situación, el sistema de tratamiento de aguas residuales está gravemente afectado.
Avilés mostró fotos del estado deteriorado de las instalaciones y explicó que las mediciones realizadas en las plantas de Costa Azul y en la planta de las 400 viviendas (Altos del Valle) arrojaron niveles alarmantes de fósforo en el agua, superando los límites establecidos por la normativa ambiental nacional e internacional. “Los niveles encontrados en los ríos y en el lago San Roque son preocupantes. Los niveles de fosfoto están por encima de los 0,5 miligramos por litro, lo que no está permitido”, señaló Avilés.
El estado de las instalaciones no es el único problema identificado. El municipio también detectó la falta en los inventarios de bienes y en los planos de las coaliciones y redes domiciliarias, lo que agrava aún más la situación. “La falta de información precisa y la mala gestión de la cooperativa han complicado enormemente la posibilidad de que el municipio asuma el control total del servicio”, agregó Avilés.
Emergencia ambiental
Con el objetivo de garantizar la salud pública y la correcta gestión ambiental, el municipio presentó un proyecto de ordenanza al Concejo de Representantes para declarar la emergencia ambiental en la ciudad. Esta medida permitirá tomar acciones urgentes y avanzar en la reasunción del servicio, que se llevará a cabo el 31 de marzo bajo un nuevo régimen temporal.
Avilés adelantó que, para poder operar mínimamente el sistema, se necesitará una inversión de al menos 1.500 millones de pesos, una cifra que, según el intendente, será indispensable para garantizar un servicio funcional y seguro para la comunidad. “El trabajo de los técnicos ha permitido identificar la necesidad de una intervención inmediata, y estamos comprometidos en resolver esta crisis, siempre poniendo en primer lugar la salud y el bienestar de nuestros vecinos”, concluyó Avilés.