La provincia de Jujuy obtuvo la autorización de la Nación para implementar el recientemente lanzado programa provincial de cultivo y producción de cannabis con fines medicinales. Para iniciar el proyecto sólo resta el permiso para importar semillas de la planta, informaron desde el Gobierno jujeño.
La autorización fue refrendada mediante un convenio entre el gobernador de Jujuy Gerardo Morales y Adolfo Rubinstein, titular de la secretaría de Gobierno de Salud de la Nación.
La firma corona un proceso de obtención de permisos necesarios para avanzar con el plan de producción de cannabis con aplicaciones terapéuticas en la finca de administración estatal El Pongo, ubicada a unos 34 kilómetros al sur de la capital provincial.
En adelante, la prioridad será “obtener con celeridad los permisos para la importación de semillas y así dar inicio a la etapa 1 del proyecto, consistente en un plan de cultivo piloto para verificar la adaptación genética de diferentes cepas de cannabis a los predios seleccionados”, según detallaron.
Los primeros pasos de ejecución del plan, con un cultivo sobre alrededor de 20 hectáreas, apuntan a “contar con las ores y biomasa de cannabis para continuar con la fase de industrialización y poner en marcha el proceso de evaluación médica en hospitales públicos de Jujuy y el resto del país”.
Dicha fase se resolverá con aceites elaborados en la provincia para determinar el tipo de derivado de cannabis útil para el tratamiento de epilepsia refractaria, única patología autorizada por Salud para ser tratada con derivados de cannabis.
El objetivo de Jujuy es complementar la mirada que en materia de salud realiza Nación y, a mediano plazo, posibilitar el uso de cannabis medicinal en otras patologías y afecciones sobre la base de los resultados científicos que arroje el programa provincial.