El presidente Alberto Fernández hizo un fuerte llamado a la unidad dentro del Frente de Todos, dijo que dentro de la coalición oficialista hay que “aprender a convivir con las diferencias”, pero aclaró que “no existe una Presidencia colegiada”.
“La unidad es absolutamente necesaria” dentro del Frente de Todos, dijo el Presidente en diálogo con El Destape Radio, y llamó a todos sus integrantes a “estar unidos para que no vuelvan a gobernar los que ya lo hicieron y dejaron un daño incalculable”.
Durante una entrevista brindada en la mañana del martes a El Destape Radio, Fernández dedicó un extenso espacio a responder consultas sobre el estado de la coalición gobernante y, en particular, sobre su relación con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
“Yo escucho a todos, pero la verdad es que el presidente soy yo y el que tiene que tomar las decisiones soy yo y eso hay que entenderlo porque así funciona la república en Argentina. Yo valoro a todos. A Máximo (Kirchner), a Cristina, a (Sergio) Massa, pero lo que digo es cómo funciona un gobierno. No existe la Presidencia colegiada”, señaló.
“Aprender a convivir” con las diferencias dentro del FdT y “sacarle dramatismo” a la situación interna fueron dos conceptos ampliamente reiterados en la entrevista por el mandatario, quién además dijo que no encontrarán en él ningún “gesto que rompa la unidad”.
Además, se refirió a su intención de institucionalizar la coalición, una idea anunciada a fines del año pasado en un acto en Plaza de Mayo: “Cuando yo planteé que rumbo al 2023 ir a unas PASO donde cada uno pueda representar lo que cada espacio contiene, lo hice no para molestar a alguien sino justamente para preservar esa unidad y que luego todos acompañemos. Eso es lo que quise hacer y es lo que voy a hacer”.
En tanto, Fernández insistió en que, de su parte, “solo van encontrar voluntad de seguir trabajando juntos” dentro del Frente de Todos y expresó que eso se va “a ir logrando poco a poco”.
“Hice un enorme esfuerzo para unir partes; lo hice sin la idea de ser candidato; lo hice por convicción”, manifestó Fernández, quien agregó que, dentro de la coalición oficialista, “no se puede (seguir) sin nadie”. “Aquí nadie sobra, nadie está de más”, subrayó.
En tanto, reconoció como “evidente” que “no” hay “miradas parecidas” en ciertos puntos dentro del oficialismo, algo que quedó reflejado en la votación dividida que hubo en el Congreso en lo que respecta al acuerdo con el FMI.
“También es evidente que, cuando me pidieron que me haga cargo de esto, sabía que tenía que tomar decisiones y esperaba que me acompañen, pero no todos me acompañaron. Yo respeto eso porque no todos debemos pensar igual y hay que respetar la diversidad, pero no podemos darnos el lujo de desunirnos, por la causa que sea, egoísmo, narcisismo, política”, añadió.
Asimismo, el mandatario afirmó no ser un “títere de nadie” ni tener un “jefe político”.
“Ha quedado que tengo diferencias políticas con algunos y yo actúo según mis convicciones”, subrayó.
Luego citó a Juan Perón, a quién calificó como “el más grande de todos” y quién enseñó a estar “unidos y organizados porque la organización vence al tiempo”.
“Debemos organizarnos en la divergencia porque el peronismo nunca fue unidad de conceptos ya que siempre hubo, como decía Perón, muchachos más revoltosos y señores más conservadores. De aquellos revoltosos nunca fui y tampoco fui un conservador”, aclaró.
En esa misma línea, el Presidente dijo que ha “dado las peleas” que tuvo que dar: “No las doy a los gritos, pero no soy moderado. Soy un tipo que tiene estos modos. Soy una persona que puede discutir en este tono de voz, sin gritar. Qué hubiese pasado si caímos en ‘default’. Era un tipo de coraje, pero habría empobrecido a los 45 millones de argentinos”, argumentó.
Finalmente, se dirigió a los militantes y les pidió estar “tranquilos” ya que “al Presidente lo que más le importa” es estar “todos unidos para poder enfrentar el 2023 ganando”, concluyó.