Muy pronto inaugurará en Villa Carlos Paz, el bar El Emperador, ubicado en Av. Uruguay (639) esquina San Martín, que surge como el primer emprendimiento de la Cooperativa de Trabajo Albergo Ético Argentina. La misma está constituida por personas con discapacidad y sus familiares, y tiene como objetivo ser una fuente laboral digna para toda la vida.
Los jóvenes que desempeñan diferentes roles en el bar, – en estos momentos son seis personas abocada a la tarea-, tienen como experiencia previa haber trabajado en el Hotel Albergo Ético, donde se entrenaron en distintas labores de atención al público en el rubro de Hotelería y Gastronomía. Lamentablemente el lugar debió cerrar sus puertas tras la pandemia por Covid-19.
La nueva cooperativa que estos jóvenes con apoyo de sus familiares pudieron constituir, tiene como meta próxima poner en funcionamiento este bar, que “apunta a lograr el mejor cafecito de la ciudad”. Por estos días, los chicos y chicos se encuentran en un proceso de aprendizaje, adaptación y ensayo de las nuevas tareas que realizarán en el local.
“Van a ir rotando de roles. Todos aprenden cómo se hace cada cosa en la medida de sus posibilidades. Serán mozos, cajeros, se dedicarán a la limpieza del local, al contacto con los proveedores, etc. La idea es que sepan cómo hacer todo en este proceso de aprendizaje que van transitando rumbo a la inauguración del bar“, contó Elvia, secretaria de la Cooperativa de trabajo, socia y madre de uno de los jóvenes con Síndrome de Down que conforma la misma, a Carlos Paz Vivo!
La mujer destacó la importancia del proyecto que apunta a la autonomía y el desarrollo personal de personas con discapacidad: “Esta cooperativa de trabajo es única porque es para toda la vida, es la fuente de ingresos, fuente laboral para todos los socios que la integran. Sin dudas, un paso que innova en materia de discapacidad. Los chicos tendrán su fuente laboral de la mano de una cooperativa perfectamente constituida, con su matrícula, con todo en regla y los deseos de brindar el mejor servicio en el rubro”.
Verónica, otra mamá de otro de los socios, Gastón, señaló: “Tuvimos experiencias a puertas abiertas, pero sin inaugurar. La inauguración será un momento muy importante. Ya todo está en regla, habilitado y funcionando como corresponde, estamos felices por eso”.
Y continuó: “Todo es muy virtuoso en este proyecto, creemos que va a ser un éxito absoluto”.
Aprender a ser Cooperativa
Respecto al funcionamiento de la cooperativa como tal, Elvia comentó que los jóvenes conocen y estudian, punto por punto, lo que significa el funcionamiento de la Cooperativa que conforman. “Desde el INAES (Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social) recibimos capacitación de cómo funcionan las cooperativas, del estatuto, reglamento, etc, etc y todo es trasladado a los chicos a través de un mecanismo de transmisión que hemos implementado y funciona muy bien”, expresó.
Por su parte, Verónica, dijo: “Se está organizando el tema de los turnos y las rotaciones en el trabajo para que sea equitativo para todos, y cada uno de los socios tengan el descanso que merece, más allá del trabajo que es la razón principal por la cual se abre el bar, la fuente laboral. Está todo pensado para que salga lo mejor posible”.
Para el bar, se realizó una carta con diseño accesible, realizado por Lucía Spotti Cajal. “Está ideado para que los clientes puedan hacer su pedido, y los jóvenes lo puedan entender completamente y cumplir con ello. Ya que muchos de los socios no acceden a la lectoescritura, hay ilustraciones y dispositivos que se están probando y funcionan muy bien”, contó la mujer.
Asimismo, destacó que los chicos “son trabajadores conscientes de una cooperativa, responsables y difusores de lo que ellos mismos promueven con su propia vida. Es un trabajo completo el que se está haciendo y pionero en el país. Tanto los chicos como los familiares, hemos asumido este trabajo con mucho amor”.
Por otro lado, los familiares dejaron en claro que se trata de un proceso que lleva sus tiempos. “Los chicos, los socios, son lo que deben desempeñar cada tarea dentro del bar, están aprendiendo muy bien, nadie hace la tarea de ellos, realmente es un proceso de aprendizaje importante y estamos satisfechos y seguros de hacerlo de esta manera, que es como realmente debe funcionar para ellos”, explicó Verónica en relación a los tiempos y la tarea que las familias llevan a cabo junto a los jóvenes con discapacidad.
Un socio, un voto
“Los chicos aprendieron herramientas para su autonomía e independencia cuando tuvieron la experiencia del hostel Albergo Ético y con todo ese aprendizaje, más el nuevo, es que abordamos el nuevo proyecto del bar. Tenemos a otra mamá de los integrantes de la Cooperativa que es la tesorera, yo soy secretaria. Tomamos las decisiones entre todos, como deber ser en una Cooperativa: esto es, un socio, un voto”, detalló Elvia sobre el funcionamiento interno de Albergo Ético Argentina.
Respecto a las motivaciones personales que dieron impulso vital al proyecto, Elvia, expresó: “La motivación fundamental era que mi hijo tuviese un trabajo, que lograra sentirse útil, ganar su propio dinero y gastarlo en lo que se le ocurra y por sobre todas las cosas, que sea feliz”.
Verónica y el resto de las familias apuntan al mismo propósito y de a poco,el proyecto va tomando fuerza y ya está a poco tiempo de hacerse realidad, cuando el bar sea inaugurado.
Los primeros intentos tras crear la cooperativa de trabajo
Cuando se creó la cooperativa, los socios buscaron una casa para volver a poner en funcionamiento el hostel. A los tres meses de la búsqueda, alquilaron una sede de la cooperativa en el centro de Carlos Paz.
“Los papás pagamos el alquiler, hablamos con un acompañante terapeútico, un técnico en gastronomía, quien agrupó a lo chicos y pudo limar cuestiones, sobre todo emocionales, como miedo a salir, enfrentarse al público, etc, que había dejado la pandemia.”, recordó Elvia.
Posteriormente, en diciembre del 2021, los chicos de Albergo Ético Argentina trabajaron como mozos en fiestas de fin de curso, y otros eventos para ir ganando experiencia.
En julio de este año, la cooperativa ya comenzó a funcionar con todas las herramientas necesarias que requiere la organización. Los socios hicieron un pedido para conseguir una sede, un lugar donde poder realizar el trabajo que ellos saben hacer en un programa de TV canal 12 de Córdoba, y una persona, tras ver la solicitud, puso a disposición un local comercial, que es el lugar donde funcionará El Emperador.
“Para nosotros esa persona, que tiene un corazón de oro, es como un papá Noel. Nos facilitó el lugar en Carlos Paz, el bar, justo lo que necesitábamos para brindar el servicio de desayunos y meriendas, de lunes a viernes, de 8 a 20 hs, que es lo que hoy estamos haciendo”, contó Elvia.
Además, aclaró que el bar funcionará un par de años, y que el objetivo último de la cooperativa Albergo Ético Argentina es lograr poner en funcionamiento un hostel, donde los chicos, lo socios, trabajen en aquello que saben hacer. “La idea, además, es ser multiplicadores de esta forma de trabajo para muchas personas que están en la misma condición que ellos estuvieron”, destacó la secretaria de Albergo Ético Argentina.
Por último señaló que “es hermoso ver todos los días el progreso de los chicos. Todos los días se les enseña algo y ellos aprenden. Tenemos todas las fichas puestas en ellos”.
La mujer dio a conocer además, que hubo “muchas manos anónimas que dieron una mano, corazones solidarios que están muy cerca nuestro y que estaremos siempre eternamente agradecidos”.
La cooperativa Albergo Ético funciona con 6 jóvenes con discapacidad, que tienen entre 22 y 35 años y se hacen cargo del proyecto Bar El Emperador. Si bien los fundadores de la cooperativa fueron Juan Carlos, Rocío, Gastón, Germán, Lautaro, Candelaría, Belén y Naty , tres de ellos dejaron el proyecto para dedicarse a otras cuestiones. Muy pronto, la cooperativa volverá a renovar autoridades.
Una ilusión que no se detiene: Albergo Ético ya es cooperativa