A las 11 de la mañana comenzará en diputados una sesión histórica: será la primera vez que en la Argentina se discuta la legalización del aborto en el Congreso de la Nación.
El debate llegó a tomar instancia parlamentaria tras años de intentos de diversas organizaciones de mujeres para lograr,m en primer término la despenalización del aborto, y luego su legalización, lo que significa que, además de que la práctica dejaría de estar penada, los servicios de salud deberían garantizarla como un derecho.
El Gobierno, pese a estar en contra, impulsó formalmente el debate en el discurso que Macri pronunció el 1° de marzo, en el último acto de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso. Se trató de un hecho inédito: nunca antes un presidente argentino había promovido la discusión de la despenalización del aborto.
En el plenario de comisiones, el dictamen a favor reunió 64 firmas de diputados y el dictamen en contra, 57. Esto no significa que hoy el proyecto de aborto legal vaya a ser el más votado, sino solamente que será el primero en ser sometido a votación.
A grandes rasgos, la iniciativa a favos de la legalización declara legal el aborto hasta la semana 14ª de embarazo, y por encima de ese límite si el embarazo fuera fruto de una violación, si hubiera riesgo de vida de la mujer gestante o si se detectaran malformaciones fetales incompatibles con la vida extrauterina (por ejemplo, anencefalia, cuando se sabe que el bebé nacerá muerto o morirá a los días de haber nacido).
Si el embarazo no se encuadra en estas causales, seguirá penalizado si se realiza después de la semana 14ª.