Luego de recibir una denuncia que alertaba la tenencia de fauna silvestre en cautiverio, la Policía Ambiental con colaboración de la Brigada Civil de la Policía de Córdoba, allanó una vivienda en barrio Granja de Funes donde encontró un mono carayá.
Se trata de un ejemplar hembra que permanecía amarrada con una cadena a un poste en el patio del domicilio, ubicado a pocas cuadras de la Mujer Urbana.
El animal, que habría sido traído de la provincia de Chaco, aparenta gozar de buena salud y será trasladado al Tatú Carreta para su examen clínico y cumplir allí la cuarentena protocolar correspondiente.
La Policía Ambiental recuerda que está prohibida la tenencia, transporte y comercio de este tipo de fauna; por lo tanto el mascotismo de fauna silvestre es ilegal y puede traer aparejadas graves consecuencias tanto para los animales que son sustraídos de su hábitat como así también para las personas que los poseen.
En consecuencia, labraron el acta correspondiente por infringir la normativa vigente.