La CGT encabezó este martes una movilización multitudinaria de trabajadores para reclamar cambios en la política económica y social del Gobierno, y anunció un paro nacional para fines de marzo o principios de abril, pero sin ponerle fecha. Esto provocó reclamos de algunos sectores que derivaron en incidentes entre integrantes de distintos gremios.
La tensión que hubo en el acto se evidenció sobre todo cuando Héctor Daer dio su discurso, el que fue abucheado en varias partes, sobre todo cuando no le puso fecha a un paro nacional, y hasta cometer el furcio de que la huelga general se haría “antes de fin de año”.
El mismo Daer vivió momentos de zozobra antes de que sus custodios lo refugiaran en el hall de la sede de la Federación de Empleados de Comercio, ubicada en Diagonal Sur, a pocos metros del palco del acto central. La zona del palco terminó copada por esos grupos violentos identificados con el kirchnerismo, y hasta la avenida 9 de Julio, desde la Diagonal Sur, siguieron los incidentes, con corridas y empujones.
Luego de que se calmaran los ánimos en la calle, Daer responsabilizó “a gente del municipio de Berazategui” por los disturbios que marcaron el final del acto y, en declaraciones a la prensa, aseguró que “lo que buscaron fue enturbiar” la movilización.
Los tres integrantes de la conducción de la CGT, Carlos Acuña, Juan Carlos Schmid y Daer, fueron los únicos oradores de la movilización a la sede del Ministerio de Producción. El primero en hablar fue Acuña, quien advirtió: “Si el gobierno no da respuesta, esta CGT le va a poner fecha a un paro nacional antes de fines de marzo o a principio de abril”. El segundo orador fue Schmid, quien dijo: “Si no podemos construir un diálogo sólido, vamos a volver a tropezar con los mismos problemas que nos llevaron a la pobreza”.
El último orador, Daer, expresó: “Vinimos a decirle al Gobierno que no estamos de acuerdo con su política económica ni social. Cada vez los que menos tienen son lo que peor la pasan”.