Una operación compleja realizada por la médica veterinaria María Ahumada permitió retirar una munición de plomo del tracto digestivo del ave. La misma se llevó a cabo en la Reserva natural Tatú Carreta y el cóndor se recupera favorablemente.
Según informa Perfil Córdoba, en un esfuerzo por salvar la vida de un cóndor, una intervención quirúrgica inédita se llevó a cabo en la Reserva natural Tatú Carreta, ubicada a 80 kilómetros de la ciudad de Córdoba, en la localidad de Casa Grande entre Molinari y Valle Hermoso. La médica veterinaria María Ahumada, referente sanitaria del lugar, lideró el procedimiento, que consistió en retirar una munición de plomo del estómago del ave.
El cóndor había sido encontrado en Villa de las Rosas el 9 de agosto, mostrando signos de intoxicación. Los análisis que se le realizaron revelaron niveles elevados de plomo en su organismo, lo que sugirió que había ingerido municiones de plomo o que había recibido un disparo. La única opción para salvar al animal era una operación quirúrgica compleja.
“La munición estaba alojada en el tracto digestivo, lo que requería una intervención quirúrgica para retirarla. La intervención fue por vía endoscópica, se llegó hasta el estómago muscular y se retiró la munición. Es una intervención inédita por sus características”, reveló Ahumada.
“La operación se realizó el sábado pasado en Tatu Carreta y, afortunadamente, el animal se está recuperando muy bien por lo que lo continuaremos evaluando y apenas se recupere podrá volver a la naturaleza”, aseguró la profesional veterinaria.
La reserva
Tatú Carreta funciona desde hace más de 30 años en un parque de 60 hectáreas las cuales se pueden visitar en auto y tomar contacto con distintas especies de fauna autóctona. La reserva, ubicada en la localidad de Casa Grande, es el principal establecimiento que recibe los animales silvestres que rescata Policía Ambiental, organismo que depende del Ministerio de Ambiente y Economía Circular.
Se trata de fauna que proviene del mascotismo, la tenencia ilegal y la recuperación tras incendios, como osos meleros, lagartos, pumas, aguará guazú, corzuelas, pecaríes de collar, flamencos, distintas aves, cóndor andino, entre otras especies.
En el lugar también se encuentra una amplia diversidad de aves, las cuales se encuentran en recuperación, aprendiendo a cazar, ejercitando su vuelo, mejorando la musculatura de sus alas para poder ser devueltas a su hábitat natural. Hay aves de decomiso y especies exóticas no originarias de nuestro país, que por distintos motivos no pueden ser liberadas, ya que no podrían reinsertarse naturalmente.
Fuente y foto: Perfil Córdoba