La crisis en la provisión de agua de Tanti llegó al punto extremo de que existen cabañas y hoteles que tienen que conseguir camiones que les llenen los tanques de sus establecimientos para poder atender la demanda de los turistas.
El intendente Luis Azar culpó de esta situación a la Cooperativa de Obras y Servicios Públicos y aseguró que “no hizo las inversiones necesarias” para actualizarse.
Azar remarcó que el acueducto que se rompió esta semana tiene 45 años y fue construido cuando la ciudad tenía 1000 habitantes y ahora tiene 10 mil y más de 180 complejos de cabañas.