El defensor santafesino Abel Masuero, de 35 años, firmó su vínculo con Chaco For Ever la semana pasada y en una de las cláusulas del acuerdo se estableció que el club debía brindarle una casa con pileta. Sin embargo, eso no ocurrió y el futbolista rescindió el contrato.
Según publicaron los medios chaqueños, Masuero había solicitado que su residencia tenga una piscina para pasar el verano junto a su pareja e hijas pero, al notar que la casa no contaba con una, el jugador rompió el contrato y la operación no se realizó.