El 23 de agosto de 2014 quedó marcado por un hecho de sangre que conmocionó a Villa Carlos Paz. En horas de la tarde, una familia compartía un rato libre en la Costanera del lago San Roque y observó una rara actitud entre dos hombres que se bajaron de un automóvil BMW de color blanco. Tan sospechosa fue la maniobra que una persona llamó a la Policía. A los pocos minutos, efectivos de la Departamental Punilla habían detenido a dos hombres: Aldo Rubén Campos Reynoso y Daniel Ocampo.
Unos minutos antes, en barrio Costa Azul, los dos hombres se habían bajado del vehículo y al encontrarse con el comerciante Alejandro Veiga (36), Campos Reynoso efectuó dos disparos: uno al aire y el otro a la cabeza de la víctima. Veiga murió en el acto.
Se inicia el juicio
El próximo martes, la Cámara Séptima del Crimen de Córdoba dará comienzo a las audiencias del juicio en el que están imputados Campos Reynoso, como presunto autor del delito de homicidio calificado por el uso de arma de fuego y Ocampo, de encubrimiento agravado.
La defensa de Reynoso apeló a un planteo relacionado con la “emoción violenta” que mantuvo al acusado un año en libertad. Luego de distintas pericias, volvió a la cárcel en septiembre de 2016. 0
El abogado Pedro Despouy, representante de la familia de Veiga que se constituyó en querellante, aseguró que la expectativa de máxima es hacer fuerza en la “confesión” de Reynoso. “El resto de la prueba confirma sus dichos y la confesión de él está corroborada”, dijo el letrado a Carlos Paz Vivo!.
“Vamos a intentar convencer al Tribunal a cerca de que el hecho se cometió con alevosía por las circunstancias en que ocurrió. El autor del crimen premeditó y preordenó su conducta para matar sobre seguro y sin riesgos”, agregó.
Si se confirma esta hipótesis de la investigación, a Campos Reynoso le correspondería la pena de reclusión perpetua. Sino, la pena alcanzaría los 20 años de prisión.
Los hechos
Campos Reynoso, junto a Daniel Ocampo (imputado como encubridor en la causa), llegaron a la esquina de Tobas y Calingasta en Costa Azul en la tarde del 23 de agosto de 2014, en un auto de alta gama guiados por Veiga.
Lo que Veiga no sabía ni sospechaba era que Campos Reynoso no quería hacer ningún negocio, sino que estaba celoso por una supuesta relación e este con su mujer y lo citó para ultimarlo.
Según el relato del crimen, el hombre armado bajó del auto y realizó dos disparos, uno al aire y otro directamente a la sien de Veiga quien cayó muerto al instante.
El acusado alegó que sólo quiso intimidar a Veiga, que no tuvo intención de matarlo.“En todo momento fue plenamente consciente. Premeditó matar a Veiga; engañosamente provocó el encuentro con él, le disparó en la cabeza a sangre fría, sin darle posibilidad de defenderse”, sostuvo Despouy.
Y añadió: “Mató a la víctima actuando sobre seguro y con la cobarde finalidad de obrar sin riesgos. Fue alevosía”.