Las comunidades más pobres de Hong Kong se encuentran sumidas en el caos por la nueva ola de contagios de Covid-19 que azota al país asiático y sus hospitales colapsaron al punto de que los médicos atienden a sus pacientes en las calles.
La llegada de la variante Ómicron puso en jaque a todo el sistema de salud de esas localidades, que son llamadas por los especialistas sanitarios como “las zonas de fiebre” debido a la alta demanda y a la escases de recursos.
Las imágenes que distintos reportes gráficos capturaron muestran a personas que tiritan de frío en las calles, médicos agotados y familiares que piden por sus muertos.
El miércoles se informó que se registró la cifra récord de 4.285 contagios confirmados, con otros 7.000 preliminarmente positivos en esta ciudad de 7,5 millones de personas.
Ahora, los expertos empezaron a advertir que para marzo podría llegar a 28.000 contagios diarios. Antes de la oleada actual, Hong Kong había detectado poco más de 12.000 casos desde el inicio de la pandemia.
El país tiene abundancia de vacunas, muchas de las cuales fueron enviadas por China, pero pese a esto solo 43% de personas de 70 a 79 años y 26% de más de 80 años fueron inmunizados.