Li Jingwei fue secuestrado en su aldea natal cerca de la ciudad de Zhaotong, en la provincia de Yunnan, sudoeste de China, en 1989, cuando solo tenía 4 años.

Fue vendido a una familia que vivía a más de 1.800 kilómetros de distancia de su hogar. Se lo llevó un vecino al que solo pudo identificar como un hombre calvo.

Li siempre supo que sus nueva familia era adoptiva. Pero nunca le contaron su historia a pesar de las repetidas consultas que les iba formulando a sus padres adoptivos a medida que crecía. Incluso, según escribió la BBC, recurrió a una base de datos de ADN para determinar su origen, pero no tuvo éxito. Hasta que un día decidió pedir ayuda en internet.

Para ello, a mediados de diciembre último subió un video en la plataforma Douyin donde contó su historia. “Soy un niño que está buscando su hogar. Un vecino calvo me llevó a Henan alrededor de 1989, cuando tenía unos 4 años”, contó.

En base a sus recuerdos de infancia dibujó un mapa de la pequeña aldea donde había crecido. “Este es un mapa del área de mi hogar que he extraído de memoria”, comentó. El bosquejo incluía características como un edificio que él creía que era una escuela, un bosque de bambú y un pequeño estanque.

Pronto el video se viralizó. Su historia llegó a la policía, que comenzó una minuciosa búsqueda de la aldea “dibujada” por Li tal cual él la recordaba. Y entonces los investigadires lograron identificar lo que parecía ser el pueblo del que había sido secuestrado hace más de tres décadas.

La policía comenzó así a indagar en las denuncias por desaparición de niños en la zona. Y entrevistó a una mujer que 33 años atrás había denunciado el secuestro de su pequeño hijo en 1989.

Las pruebas de ADN determinaron que se trataba de la madre de Li. Ambos finalmente se reunieron el sábado en la provincia de Yunnan. Li y su madre se dieron un fuerte abrazo y lloraron juntos de emoción tras el esperado reencuentro.

“33 años de espera, innumerables noches de anhelo y, finalmente, un mapa dibujado a mano de memoria, este es el momento de la liberación perfecta después de 13 días. Gracias a todos los que me han ayudado a reunirme con mi familia”, escribió Li en su perfil de Douyin antes de la reunión.

Li vive ahora en la provincia de Cantón, en el sur de China.