Algunos automovilistas que pretenden salir de Carlos Paz consideran que la colectora de la Autopista a Córdoba es la alternativa más eficaz para evadir los controles de alcohol y de otra índole. En esta nota te informamos cuáles son las atribuciones del puesto policial que aleatoriamente se instala sobre esa vía.
Antes de hacer referencia a este puesto policial en particular, cabe aclarar que la Policía Caminera únicamente tiene atribuciones en las rutas provinciales y en las rutas nacionales que atraviesan la provincia de Córdoba, en las cuales puede labrar actas por infracciones.
Las colectoras están bajo la supervisión de las comunas y municipios, las cuales pueden ser controladas por oficiales de policía y/o inspectores de tránsito de cada localidad. En estas vías, los policías no pueden multar a los automovilistas pero sí pueden aplicar el nuevo Código de Convivencia Ciudadana y entregar el procedimiento a la autoridad interviniente para que un juez sancione en el caso que correspondiese.
Aclarados esos puntos, corresponde informar que el puesto policial de la colectora de la Autopista Justiniano Posse está bajo la supervisión de la Unidad Departamental Punilla y no de la Policía Caminera. El mismo suele instalarse en horarios y días aleatorios en la zona de la disco Keops con el fin de realizar todo tipo de controles vehiculares.
Sin embargo cabe mencionar que, debido a que se utiliza la colectora para evitar controles de alcohol en la autopista, el puesto policial suele pedir excepcionalmente participación de la Policía Caminera en jornadas puntuales como viernes y sábados (sobre todo en verano), con el fin de evitar conducciones potencialmente peligrosas.
Desde la Unidad Departamental Punilla informaron a Carlos Paz Vivo! que a veces en el puesto también suelen solicitar la participación de inspectores de tránsito de Seguridad VCP para la utilización de sus alcoholímetros, con el objetivo de confirmar o descartar alcohol en sangre de los conductores.
Rubén García, director de Seguridad VCP, señaló que muy a menudo la policía local solicita participación de los inspectores municipales, en este y otros puestos, para controlar la alcoholemia. “En los casos que dan positivo, solemos aplicar una sanción por la vía municipal que es más directa que por el Código de Convivencia. Se le retiene el auto al conductor alcoholizado y luego se aplicará una multa a través del Juzgado de Faltas del municipio”, aclaró.
Como se dijo, en los puestos de policía los oficiales pueden aplicar el Código vigente desde el 28 de marzo de 2016, el cual en su Artículo 82 de la Ley Provincial 10.326 señala: “Serán sancionados con hasta tres (3) días de trabajo comunitario o multa de hasta seis Unidades de Multa (6 UM) y aplicación de instrucciones especiales los que por su culpa se encontraren o transitaren la vía pública o lugares públicos o abiertos al público en estado de ebriedad o bajo acción o efectos de estupefacientes, psicofármacos o cualquier otra sustancia, en forma escandalosa. El máximo de la sanción prevista se duplicará si en la infracción intervinieren dos (2) o más personas. En estos casos y en aquellos en que no se dé la condición de escándalo, la autoridad policial adoptará las medidas necesarias o convenientes para el mejor resguardo de la integridad física de los afectados y para hacer cesar la infracción o evitar que se incurra en ella”. Esta sanción la aplica la Justicia ordinaria tras la participación de la fiscalía interviniente.