El casamiento de Lionel Messi y Antonella Roccuzzo es el evento social del año de la ciudad de Rosario, por lo que contará con un operativo de enorme magnitud para cuidar la seguridad y la privacidad de todos los asistentes.
A pesar de que la familia Messi y los organizadores buscan alterar lo menos posible la vida de los residentes de Rosario, se espera que unos 300 efectivos de distintas fuerzas estén encargados de la seguridad del casamiento.
El operativo se desplegará desde el jueves, un día antes de la realización de la gran fiesta. Cubrirá al hotel City Center, sus alrededores y todos aquellos lugares a los que se trasladen los invitados.
En la ciudad, el operativo estará a cargo de fuerzas provinciales y federales. Según informó el sitio Rosario3, actuarán la Policía de Santa Fe, Brigada Motorizada, Policía Vial, Tropa de Operaciones Especiales y hasta la Gendarmería Nacional.
Muchos de los invitados que llegan desde el exterior aterrizarán en Buenos Aires y se trasladarán por tierra hasta Rosario. Quienes vuelen directo a la ciudad santafesina, tendrán una atención de privilegio en el aeropuerto y se les asignarán espacios para no mezclarse con el resto del público.
La mayor preocupación para los novios es la filtración de fotos de la intimidad de la fiesta. Trascendió que a los mozos y trabajadores que presten sus servicios en el hotel se les hará firmar un acuerdo de confidencialidad.
A los invitados no se les quitarán los teléfonos celulares, aunque Messi, Antonella y la organización apelarán a la colaboración y la buena predisposición de todos para evitar que se den a conocer imágenes privadas del festejo.