Las inundaciones causadas por la tormenta tropical Harvey, que ha dejado al menos ocho muertos en Texas y llevaría a decenas de miles de personas a dejar sus casas, probablemente subirán de nivel, dijeron el lunes las autoridades, mientras las lluvias sigen azotando la costa estadounidense del Golfo de México.
La tormenta se convirtió en la más poderosa que ha azotado a Texas en más de 50 años al tocar tierra el viernes cerca de Corpus Christi, 354 kilómetros al sur de Houston. Lo peor parece lejos de haber terminado, ya que el Servicio Meteorológico Nacional emitió numerosas alertas regionales sobre inundaciones.
Equipos de la policía y la Guardia Costera han rescatado a más de 3.000 personas hasta el momento, muchas desde los tejados de sus viviendas gracias a la ayuda de helicópteros.
Fotos tomadas antes y después de la inundación dejan al descubierto los daños que Harvey causó en la cuarta ciudad de Estados Unidos: las imágenes recordaron la devastación provocada por el huracán Katrina en Nueva Orleans en el 2005.