PhoTortul 2328
“34 Navidades sin Luca”
📷 San Telmo – Bs.As.
2019
Se acercan las fiestas y es inevitable que en algún momento me acuerde de esa lejana Navidad de 1987, triste por temas varios, escuchando en mi cuarto, con mi ‘pasacaset’ al palo, el TDK de Ferro Cromo que tenía grabado (en copiado lento), el disco ‘After Chabón’ de Sumo, que contenía la versión de ese villancico ñoño, creo que de origen alemán: ‘Noche de Paz’; pero en rabioso tempo de punk rock.
Solo Luca pudo hacer eso… y convencer a los otros cinco compañeros de Sumo de hacerlo.
“Noche de Paz
Noche de amor
Todos acá por favor
Mamá e hijo
con antifaz disfrutando su noche de paz.
Sueña un sueño imposible.
Sueña un sueño imposible
Che!
Sueña un sueño imposible
Sueña un sueño imposible”.
Cuenta el periodista (devenido en saxofonista de Sumo) Roberto Pettinato en su libro:
“Esta última frase dicha una y otra vez, penetraba en tu mente como un mensaje derrotista y al mismo tiempo como un fiel ejemplo de la filosofía de Prodan, de crimen y castigo a la sociedad. Esta versión era la que quisimos escuchar todos alguna vez y nadie se animó a hacer. Era considerada una falta de respeto o algo así. ¡No para nosotros! En realidad queríamos ver si podíamos tener un pequeño hit navideño que nos llenara la mesa de almendras.”
‘Sumo por Pettinato’, 2009.
Y sí.
Dije triste navidad del ’87, porque estaba sumida en tiempos de la hiper inflación tras la ‘primavera alfonsinista’, inquietantes levantamientos carapintadas, también vivíamos sumidos en el miedo a la mortal ‘Peste Rosa’ (aún ni se le decía SIDA) que se llevó a Miguel Abuelo y a Federico Moura, de Los Abuelos de la Nada y Virus, respectivamente.
Encima, ese 22/12: ‘Luca is Death’.
La noticia, no sé como nos llegó acá, a la Villa. Supongo que por la TV de Córdoba o alguna radio. Un bajón total.
El cantante apareció muerto en su camastro desvencijado, en su último reducto, en un conventillo de San Telmo, luego de un recital ‘pobretón’ de la banda que ya estaba en caída libre por problemas varios. La salud y las adicciones de Luca más que nada.
Mis fotos de esta nota tienen apenas un par de años.
Así está ese solar del barrio turístico de San Telmo, convertido en un santuario de los fanáticos.
Para el que no saben quién fue Luca Prodan, lo invito a googlear.
Para los que admiraron su irrupción en la música local, su pateada de tablero del Rock Nacional, sus influencias traídas de su Europa natal (nació en Italia, se educó en Escocia), les cuento una ‘postal carlospazonza’ de Luca, que viví con mi pandilla. Y la cuento como me la acuerdo… aunque ya se sabe, lo dijo el Indio:
“hay recuerdos que mienten un poco”.
Calculo que fue en el verano del ’86 o del ’87 y nos enteramos del recital por una pegatina de poste:
“Sumo en el Club de Pesca”.
No eran tiempo de celus ni de camaritas de fotos, aunque Yo ya me filmaba todo con mi JVC. Eso se me escapó.
Habremos hecho una ‘Polla’ con los escasos Australes que teníamos entre el Colorado Vaccarone, el Gordo Aplanadora… y algunos más, que fueron más por curiosidad que por espíritu rocker.
Tampoco Sumo era Rock de lo que se entendía por tal en esos años.
Tenía Reggae cuando ‘Pericos’ ni existían y tenía un Punk más contundente que ‘Los Violadores’. Pero tenía otra cosa, tenía magia, tenía misterio, tenía algo como teatral.
Por caso, me recuerdo en patota, seguramente copeteados previamente con Gancia o con cerveza, porque ya dije, los Australes no valían nada, en el piso de básquet del mítico Club de Pesca.
¿Habremos sido 200?!?
No creo que fuéramos muchos más.
Lo que si recuerdo, como si estuviera viéndolo hoy (soy camarógrafo nato y recuerdo pavadas así… con nitidez HD), a la banda escasamente iluminada y estallando desde el escenario.
Estaban Ricardo Mollo y Diego Arnedo en guitarra y bajo, que luego de la muerte de Luca, armarían Divididos. Estaban Germán Daffunchio y Superman Troglio (luego Las Pelotas) en guitarra rítmica y batería… y en el saxo estaba Petti con su overol anaranjado.
¿Y Luca?!?
Faltaba el Pelado.
Cada año que pasa le agrego más suspenso (ya avisé que mis recuerdos mienten un poco), pero calculo que a los 2 o 3 minutos de la banda sonando arrolladora con la espantosa acústica del club ‘verdeamarelo’, notamos al lado nuestro a un tipo bajito, con campera de cuero a pesar del calor y una melena ruluda grotesca, tipo maradoneana.
La sorpresa se coronó con este extraño personaje yendo al frente, subiendo al escenario, debajo del tablero de básquet (Local 00 Visitante 00), y agarrando el micrófono de caña y cable y empezando a cantar.
‘Regtest’, ‘Debedé’, ‘Los Viejos Vinagres’… ‘La Rubia tarada’ (hoy no se podría cantar)… ‘Heroína’… ‘Los cinco magníficos’… y tantos temas más que forman parte de la banda sonora de mi cochina vida.
Luca dejó de vivir en esta dimensión hace 34 años… pero su legado está intacto.
Aquí en Argentina (en Traslasierra, donde se vino a curar), tuvo una ‘sobrevida’ impensada en Europa.
Me piden de Carlos Paz Vivo que tire mis recuerdos (aunque ya saben… que mienten un poco) y son estos. Pero si me apuran tengo más:
Molino Rojo o Khalama explotaban cuando sonaba esa bola de rock y la voz de Luca en cocoliche cantaba:
“Un tornado arrasó a tu ciudad… y a tu jardín primitivo…”
Pero ya se sabe, es mejor no hablar de ciertas cosas.
Luca murió ese 22/12… y hace 34 navidades que se lo extraña.
#LucaProdan
#SumoEnClubDePesca
#RockNacional